Kim Jungwoo es lindo, al menos así lo piensa Lucas.
Lucas lo encuentra similar a un dulce cachorro. Aunque a veces Jungwoo llega a ser cariñoso con casi todo el mundo. Lucas no sabe el porqué, pero eso suele irritarlo...más de lo normal.
Con los años ha conocido a los demás miembros, entablando una buena relación con cada uno a pesar de la barrera del idioma que constantemente se volvía un problema. Ha notado como los miembros adoran a Jungwoo, los hyungs especialmente. Taeyong suele sonrojarse cada vez que Jungwoo dice algunos comentarios fuera de lugar. Sí, eso realmente lo irrita.
Así fue como un día descubrió y casi admitió para sí mismo, que quizás le gustaba Jungwoo. Pero obviamente no podía decírselo a nadie, así que decidió sufrir en silencio. Sentía como sus mejillas quemaban cada vez que se ponía celoso y tenía que alejarse, ya que podía explotar en cualquier momento.
No pasó mucho tiempo de que sus verdaderos sentimientos comenzaron a salir a la superficie. Ocurrió justamente un viernes por la noche, no tenían agenda ese día y se reunieron entre todos para pasar un buen rato dentro de los dormitorios. Lucas se encontraba relajado en el sofá mientras que Jungwoo descansaba su cabeza sobre el hombro del moreno. Era algo que solían hacer, acurrucarse juntos mientras los demás armaban un escándalo en el fondo. Jungwoo suspiró y comenzó a jugar con la mano de Lucas, la pellizcaba o la apretaba. El más alto hizo caso omiso, ya estaba acostumbrado, además que aprovechaba la situación.
-Lucaku, estoy cansado...- soltó Jungwoo muy cerca del oído de Lucas, haciéndolo sonrojarse un poco.
- ¿Otra vez con ese apodo? - preguntó rápidamente- No sé cómo se te ocurrió, hyung..
- ¿No te gusta?, yo creo que sí te queda. Es lindo- respondió y jugó con el cabello de Lucas, despeinándolo un poco- Lucaku, Lucaku...
Lucas abrió la boca para quejarse, pero realmente no podía decirle nada malo, no cuando estaba actuando tan tierno hacia él. La cercanía de Jungwoo lo ponía demasiado nervioso, podía sentir claramente la respiración del contrario sobre él. Tampoco quería voltear hacia su izquierda ya que sus rostros chocarían. Sentía que podía morir en cualquier momento.
-Ya basta, Snoopy- dijo Lucas, en un tono juguetón- Realmente eres tan...
-Oye, nunca me has llamado así antes- sonrió en respuesta- Me gusta ese apodo.
-Bueno, tú te llamaste a ti mismo de esa manera en aquella transmisión pasada. No es como si yo lo hubiera inventado...
-Aun así, me gusta como tú lo dices.
Lucas volteó finalmente y allí lo vio, Jungwoo actuando como todo un cachorro. Sus ojos brillaban y no dejaba de sonreír, su corazón comenzó a derretirse ante la imagen. Quizás si se acercaba un poco más podría intentarlo...
Pero no fue así, Jungwoo volteó en dirección hacia la cocina, ya que Jaehyun lo llamó en voz alta. Se levantó y se fue, dejando a Lucas casi petrificado en su asiento.
-Soy un estúpido- dijo para sí mismo- ¿Qué pensaba hacer?
En el fondo podía escucharse como la risa de Chenle retumbaba por las paredes. Con tan alegre y chillón sonido no tenía tiempo de deprimirse, así que se evitó el momento de amargura. Vio a Haechan dirigirse hacia la cocina y lo siguió, quería ver porque tantas risas provenían de allí.
Se encontró con un completo desastre, como era de esperarse de una reunión de 18 personas en un lugar pequeño. Se burlaban de un video de Mark actuando todo ebrio, donde aparentemente había bebido solamente dos vasos de vino.