❤️ Amor Gamer ❤️ (Fanfic CDM Armin)

Capítulo 4.

-¿Te puedo pedir un favor?-finalmente, acabamos en el sofá del salón ya que Lysandro nos llamó para comer. En ese mismo momento mi hermano estaba en la cocina, haciendo algo que tardaba mucho. Tenía hambre.

-Sí, claro.

-En el caso de que Debrah volviera... ¿Dejarías que volviera a hacerme lo mismo? Ya, ya sabes...-le hice silencio poniendo mi dedo índice en sus labios.

-¡NO! ¡Nunca, Castiel, nunca! Si esa bitch vuelve, estaré aquí. Podemos utilizar movimientos del Mortal Kombat, ahora que sé que juegas. No volverá a hacerte lo mismo, no la dejaré.-estabamos los dos muy serios. Debrah es la única que consigue que nuestro humor quede por los suelos.

-Gracias, tabla. Y... ¿te puedo pedir otro favor?

-Vale, pero no abuses, plano.-le di un codazo y reímos levemente. Mi estómago sonó. ¡Lysandro, la comida! Siempre pasa igual, te llaman para comer, vas tú y bajas con hambre, para luego darte cuenta de qué es una trampa. No hay comida.

-Si ella volviera... ¿podrías hacer algo por mí?

-Claro, Cassy, mejor amigo tsundere plano.-sonrió.

-¿Serías mi novia?-en ese momento abrí los ojos y la boca. WTF, Castiel. ¿Tu novia?-. De... mentira, claro.-hizo un gesto con la mano para restarle importancia y yo relajé la expresión.

-¿Por qué debería ser tu novia falsa?

-Para que me deje en paz. Si me ve con una chica, me dejará en paz.

-¿Y cómo yo he sido la elegida?-le sonreí pervertida-. Vaya, vaya. Parece que las tablas tenemos alto nivel para ser novias falsas.-le estaba admitiendo que era una tabla, pero, es que soy una tabla. El mote estaba bien puesto, la verdad.

-¡Cállate, tabla! Es creíble, eres mi mejor amiga. Pasamos mucho tiempo juntos. ¿O acaso no recuerdas cuándo Peggy empezó a decir que salíamos cuándo tu apenas llevabas en el instituto una semana?

-Es cierto. Nos hicimos amigos desde el primer momento, ¿eh? 

-Aunque conocernos en el despacho del director no fué la mejor manera...-es cierto, a mi me pillaron jugando a la consola en clase y a él en el patio escuchando música mientras se saltaba la clase de ciencias. La directora tenía que perseguir al bicho feo que tiene cómo perro y nos echó la bronca a la vez, aunque fuera por motivos distintos. Además, le pusimos laxante en el agua al Señor Farrés para librarnos de la hora de castigo. Fué épico.

-En realidad, si yo no hubiese estado jugando a Project Diva en la hora de ciencias y tú no hubieses decidido saltártela, posiblemente no seríamos amigos.

-Bueno, ¿he de recordarte que Lysandro y yo tenemos una banda? Tú te inscribiste al insti después, nosotros ya éramos amigos.

-Mira, Cassy. Lysandro, hace tiempo, tuvo una novia. Entró a casa varias veces y ni me enteré. Lo supe porque me lo dijo.

-¿No te enteraste de que había una chica en tu casa?

-Qué va, al llegar a casa, cojo comida, la subo al cuarto y mientras juego, como. Cuándo Lysandro ha hecho la cena prácticamente no tengo hambre. Ceno, vuelvo al cuarto, y paso la noche en vela jugando o viendo anime.

-Oh, entonces, no, no nos conoceríamos. Hice bien saltándome esa clase.

-Yo hice bien jugando.-nos quedamos en silencio, hundidos en el sofá. Se escuchaba a Lysandro cojer platos.

-¡Chicos, la cena! Me retiro cinco minutos y activáis el modo Titanic en el sofá. De verdad, eh.

-¡¿Cinco minutos?! Llevas ahí tres vidas, colega.-dijo Castiel mientras nos levantábamos. Nos sentamos alrededor de la mesa y cogí el tenedor.

-¿Qué es esto?-dijo Castiel cojiendo el tenedor y tocando ligeramente la carne del plato.

-Pollo, ¿que va a ser?

-¿Seguro?-asintió enarcando una ceja. Que pesado, lo hace todo el rato-. Castiel, pide pizza. Con queso.-susurré.

-¡Te he oído, Gabriella! Pero bueno, sí, mejor pide las pizzas. No nos vayamos a arriesgar.-Castiel ya estaba llamando a la pizza a domicilio. Yo me levanté de la mesa y subí de nuevo a mi cuarto. Estaba iniciando los Sims, que de tantos Mods que tengo tarda la vida en cargar.
-Oye, tabla.-Castiel entró a mi cuarto. Gracias, Lysandro, por obligarme a ordenarlo.
-¡Pizza!-me levanté de un salto y me dispuse a salir por la puerta, pero me agarró del brazo, impidiéndolo.
-Te he hablado antes de Debrah por algo.-fruncí el ceño. Sacó su móvil del bolsillo y me enseñó un WhatsApp. De Debrah.
<<Hola, gatito. Tranquilo, que en menos de una semana vuelvo al instituto. Volveremos a estar juntos, lo prometo. Te he echado de menos y lo siento. Que sepas que te quiero. Aunque no a tus amigos. Hasta muy poco, gatito.>>

¿Es una broma, no? Primero la novia de Armin y luego Debrah. Yo no sé que he hecho.
Nos quedamos mirándonos, visiblemente incómodos. Se avecinaba un futuro y un último año no muy agradable.