Un rinconcito de felicidad
ANTOINE
Cuando aprendió que las reglas de su vida, dependían de él. Empezó a jugar con las alternativas. A pesar de lo difícil que fue, logró llegar donde pocos pueden. Él tomaba las decisiones del rumbo de su vida. Y era feliz con eso. Dinero, resuelto. Profesión, resuelto; al menos de momento. Salud, no podía estar en mejor forma, aunque quisiera. Amor, estaba bien con eso, mujeres no le faltaban. Viajes, casas, autos, amigos, todo; lo tenía todo. Hasta ayudaba a varias ONG. Y entonces, antes de alcanzar la gloria, el éxito pleno; llegó alguien que le quito la venda y lo obligó a afrontar la vida.
Porqué caminaba ese día, en ese momento, en esa estación, a esa hora, como si todo estuviera planificado, la vida, el destino o la suerte, riéndose de su autosuficiencia. Él, creyendo que lo tenía todo.
Le presentaron una alternativa, imponiéndose como el tiempo, como un reloj, caprichosamente acomodado; justo ella, tenía que ser ella la que pasaba por esa situación en ese lugar.
Fue sólo una coincidencia, a veces, él pensaba en su encuentro como, una bendición, tal vez, sus caminos debían cruzarse, ahora pensaba que, de una u otra manera, debía suceder; el inicio de una etapa, una muy importante, llena de descubrimiento de momentos buenos y algo borrascosa también.
LARISSA
Aún la duda quedaba en ella. Si ese día, 3 de mayo del 2020, no se hubieran conocido, ¿cómo habría sido su vida? Estaba segura de que con él o sin él habría logrado cumplir sus metas. Cuando empiezo, nada me detiene. Aun así, muchas cosas empezaron a surgir cuando sus caminos se cruzaron; aprendió mucho de ella misma, de su cuerpo, de su mente.
Siempre fue Rissa para sus amigos; casi nadie la llamaba Larissa, en ningún momento pensó que él, le daría otro nombre. Pero después de esa primera vez, no volvió a ser la misma, con Lara nació una parte de ella que nunca esperó conocer; tantos momentos, tantos recuerdos, aun ahora, había cosas que dolían.
¿Cómo lo describiría? Bueno con el fútbol, malo con las mujeres, mejor dicho, malo para ella. Tal vez era demasiado bueno con las mujeres.
Esta es mi historia y cómo caminé con miedo. Miedo al rechazo, miedo a fracasar, miedo a equivocarme y miedo a enamorarme de alguien; miedo a enamorarme de Antoine.
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Un rinconcito de Felicidad
ChickLitANTOINE Cuando aprendió que las reglas de su vida, dependían de él. Empezó a jugar con las alternativas. A pesar de lo difícil que fue, logró llegar donde pocos pueden. Él tomaba las decisiones del rumbo de su vida. Y era feliz con eso. Dinero, resu...