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-¿Creen que a su madre y a Leni le gusten los mariscos?- le pregunto a los Anderson.

-A mamá le gusta comer de todo. Pero mientras más ensalada haya en el menú más fascinada quedara.

-¿Ensalada de que tipo?- pregunto mientras voy escribiendo el menú.

-Ya sabes de tomate y esas cosas que les echan a las ensaladas Valemy. ¿Yo que se? No soy un cocinero.- ¿Y a este que mosca le pico? Ruedo los ojos y me regala una de esas sonrisas que hace que me derrita, pero lo disimulo.

-Mike deja tu amargaera para otro momento- regaña Keish mientras saca el vino de la nevera y sirve para los tres.- A ver, ¿Que tienes ya escrito Vale?

Llevo días planificando el menú para la cena que le prometí a Annette el primer día que llegue a la ciudad. Quiero cocinarle algo que valga la pena degustar. El primer día en el Estado ella preparo lasaña por eso no creo que sea buena idea comer algo italiano. Estaba pensando por algo que contenga mariscos. No soy chef pues mi especialidad son los postres pero creo que puedo hacer magia y mezclar ambos, ósea hacer una ensalada de pasta con salmón. Debo ver cómo me queda antes de cocinársela a ella.

Tomo un sorbo de mi copa de vino y comienzo a escribir apuntes sobre las cosas que creo serán necesarias para esta receta. ¿Debería echarle huevo?

-¿Creen que debería echarle huevo a la ensalada?

-¿A quién quieres matar con huevos?- simula asombro y le doy una mirada de confusión- No, dime enserio, ¿A quién quieres matar con huevos? Leni es alérgico.

-Ohh, no lo sabía. Entonces, huevos fuera de la receta- tacho ese ingrediente y me sigo concentrando en el menú.

-Por eso te amo- detengo mi escritura y lentamente dirijo mi mirada hacia el- Eres tan concentrada y dedicada en lo que haces.- está claro que quiere romper la poca tensión que se creó. Miro a Keish en busca de ayuda.

-¿Quieren algo de comer?- habla rápido captando mi mirada- Muero de hambre- se levanta de la isla y vuelve a la nevera.- Chicos enserio deberían dejar de tomar tanta soda. Van a terminar reven...

Sé que ya había pronunciado esas palabras anteriormente. Pero ahora es distinto. No lo hace para mantenerme cerca de él. Sé que lo hace, sé que ama. Pero es distinto a cuando sabes con quien te estas metiendo. Lo amo. Pero él está en un momento de su vida donde quiere estar conmigo pero quiere protegerme y la única manera es dejándome ir. Yo no quiero dejarlo ir. Lo amo, pero me es complicado decírselo en voz alta. Ya lo hice una vez, durante un año y medio y me fallaron, y sabiendo la situación en la que nos encontramos es difícil saber cuánto tiempo duraremos. Porque si repito esas palabras nuevamente y todo vuelve a pasar como la última vez. Entonces no creo poder soportarlo, no creo poder pasar por otro adiós, pero un adiós definitivo con Mike.

-¿Valemy te encuentras bien?- la voz aguda de Keish me saca de mis pensamientos, asiento en su dirección y miro a Mike- ¿Estas segura?- vuelvo asentir con la cabeza sin despegar la mirada de Mike que se encuentra haciendo tareas de su universidad sobre la mesa.

Supongo que siente mi mirada porque despega la vista de su laptop y me observa. Me sonríe pero no logro devolverle la sonrisa, lo nota y frunce el ceño.

-¿Todo bien?- se acerca y me da un beso de pico, vuelvo asentir pero esta vez en dirección a Mike.

-Si...Yo... Creo que iré a darme un baño. Ya estoy cansada

-¿Te ayudo con ese problema?- Me da una mirada picarona mordiéndose su labio inferior. Este hombre me va a matar con sus perversiones.

-Paso, no gracias.

EL DESTINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora