En brazos de un italiano

Parte sin título 15

—¿Qué me querías decir? ¿Es muy importante o prefieres que lo dejemos para el lunes? —preguntó ______.

—El lunes no estoy.

—Ah.

Ya habían tomado café, pero Lay pidió otros dos y un trozo de bizcocho de chocolate con nata y se quedó gratamente sorprendido al ver que a ______ se le iluminaban los ojos como a una chiquilla cuando lo tuvo delante.

—¿Tú no estás siempre a régimen como las demás?

—Supongo que no soy lo suficientemente coqueta —contestó ______ encogiéndose de hombros y disfrutando del maravilloso bizcocho—. Otra ventaja de llevar ropa amplia. Lo disimula todo.

Lay pensó, al recordar su cuerpo enfundado en el vestido azul, que ______ no tenía nada que disimular, pero decidió no seguir recordando lo que había ocurrido a continuación.

—No sé cómo empezar —dijo de repente.

______, que en aquellos momentos se estaba llevando una cucharada de bizcocho a la boca, se paró en el aire con la boca medio abierta.

De repente, el bizcocho no le supo tan bien como hacía unos segundos, así que apartó el plato y se limpió la boca con la servilleta.

—Normalmente, no doy sermones, y a ti no te lo daría si no fuera porque nos conocemos desde hace mucho tiempo —continuó Lay.

______ no contestó, se limitó a quedarse mirándolo, esperando lo peor y preguntándose cómo le iba a explicar a su nuevo jefe que había perdido la oportunidad de hacer un monográfico sobre Zhang Yixing.

—Mira, por cómo te comportaste anoche, me he dado cuenta de que tú no tienes ni idea de lo que ocurre a tu alrededor.

—No te entiendo —contestó ______ sinceramente.

—No tienes ni idea de lo que es Londres. Esta ciudad es una jungla y tú no eres un animal de jungla. Me di cuenta anoche en cuanto te vi. Te pusiste un vestido que hubiera atraído a un ciego y bebiste más de la cuenta. Resultabas muy provocativa.

______ se sonrojó de pies a cabeza.

—Adrian Walsh te quería devorar. Normalmente, no me siento responsable por el comportamiento de otra persona, pero teniendo en cuenta que te conozco desde que eras una niña...

—¡Ya no lo soy! —se defendió ______ enfadada—. ¡Sé cuidarme perfectamente, Lay! ¡No tienes por qué sentirte responsable de mí!

—Por si no te acuerdas, tuve que llevarte a casa y meterte en la cama. ¿No te das cuenta de que estabas fatal?

—¡Podría haber vuelto yo sola a casa perfectamente!

—Eso no te lo crees ni tú. Estabas fatal. Esta mañana tenía un mensaje en el contestador. Adrian quería tu número de teléfono. ¿Se puede saber que le dijiste exactamente?

—¡No le dije exactamente nada! ¡Tan sólo estuvimos charlando! No es culpa mía que quiera algo conmigo. No creo que eso fuera por mi vestido. En cualquier caso, Jessica iba más o menos igual vestida que yo y no creo que te sientas responsable de ella, ¿verdad? ¿O es que acaso te sientes responsable de todas las mujeres que llevan un vestido apretado y corto y beben un poco más de la cuenta?

—No digas tonterías.

—No estoy diciendo tonterías. Lo que quiero que comprendas es que no hay ninguna necesidad de que te sientas responsable de mí —le explicó ______ sintiéndose insultada.

—¿Qué habría ocurrido si hubiera sido Adrian el que te hubiera llevado a casa y no yo? Te advierto que Adrian es un depredador y los depredadores no se comportan como caballeros.

—Se cree el ladrón... —murmuró ______.

—¿Cómo te atreves a decirme algo así? —se indignó Lay.

______ tomó aire y lo miró a los ojos con determinación.
No iba a permitirle ni por un segundo que aquel hombre le dijera lo que tenía que hacer ni cómo debía comportarse con otros hombres.

—Es obvio que los dos veis a las mujeres como un pasatiempo y no como a compañeras en todos los sentidos.

—Te aseguro que Adrian no te habría desnudado y se habría ido de tu casa tranquilamente —le espetó Lay.

—¿Y por qué eres su amigo si tienes una opinión tan baja de él?

—Hice negocios con él hace un tiempo. Es diseñador de páginas web y es un hombre muy divertido —le explicó Lay sintiéndose insultado porque ______ lo compara con un hombre al que él tenía por un depredador.

¿Y cómo demonios había derivado la conversación en todo aquello si lo que él quería era darle a ______ un par de consejos para que supiera desenvolverse en la gran ciudad?

¿No se había dado cuenta acaso de que su inocencia y su candor eran un reclamo que no pasaba desapercibido a los ligones y a los pervertidos?

—¿Nos vamos? —preguntó ______—. Me gustaría aprovechar la tarde para escribir algo.

—Por supuesto, no pienso darle tu teléfono a Adrian —contestó Lay.

______ tenía muy claro que sólo ella y nada más que ella decidía con quien quería hablar por teléfono o salir a cenar, y no vio la necesidad ni de decírselo, aunque le resultaba insultante que Lay se creyera con más experiencia que ella y la tratara como a una chiquilla inocente e inexperta.

—Me parece muy bien —contestó.

En lugar de conseguir que Lay se relajara, sorprendentemente, el efecto fue el contrario.

—¿Eso quiere decir que ya hay un hombre en tu vida? Normalmente, cuando una persona no habla de su novio o de su novia es porque se trata de una persona indeseable.

______ lo miró enfadada y Lay comprendió que se había excedido.

—Sólo quería asegurarme —se disculpó pagando la cuenta.

Mientras salían del restaurante, ______ se dio cuenta de que aquel hombre podía resultar de lo más desagradable y de que jamás dejaría de tenerla por una niña pequeña.

______ necesitaba que la vieran como a una igual, pero ni siquiera le había dejado pagar su comida.  

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😘 hasta la próxima besos mis bellas lectoras 😙👋