Follow Me 《YoonSeok》

Once.

Hoseok estaba en las ultimas, ya no podía mas. Los guardias desataron al castaño dejándolo  en el piso, sus brazos y piernas estaban fracturadas, su espalda estaba deplorable sangre en todo su cuerpo. Cerró sus ojos esperando la muerte.

Unos golpes despertaron al menor.

-Todavía falta mucho escoria.
-Ya matame.

Los guardias comenzaron a reír, arrastraron al menor de los pies hasta llevarlo a un bote muy grande de agua, lo encadenaron de las manos, el verdugo alzó la cabeza del menor por los cabellos y hundió el rostro a el agua. Las burbujas de oxígeno salía repetidamente. El verdugo por fin saco la cabeza del castaño al aire.

                                         [...]

Yoongi tenía demasiada hambre ya habían pasado varias horas desde aquel horrible acontecimiento. Trato de safarse de las cadenas pero no podía. Los pasos volvieron a escucharse, la puerta abriéndose lentamente.

-Oh no, por favor no.

El pelinegro se acostó rápidamente simulando estar dormido. 

-Despierta, es hora de que veas a tu novio...o la cabeza de tu novio -Comenzó a Reír-

Los ojos de Yoongi se abrieron mucho. No quería perder a su Hoseok.

Los guardias tomaron a Yoongi por los brazos, lo llevaron a una habitación, unas criadas cambiaron al pelinegro, el seguía en shock.

Los guardias levantaron a Hoseok del suelo, lo sentaron en una incómoda silla. DakHo fue a donde Hoseok se encontraba.

-Al parecer tu final se acerca y no podrás impedirlo.

El dictador se marchó, se dirigió hasta el centro del distrito, llevaron al castaño y al pelinegro hasta allá.

Las bocinas colgadas se encendieron, las personas salían rápidamente. Hoseok estaba aterrado, sabía que su final se acercaba, nadie podía hacer nada. Miraba por todos lados para ver por última vez a su Yoongi. Solo encontró a su padre con una enorme sonrisa, Taehyung ni Namjoon se encontraban ahí. Lo subieron a un escenario de madera, una guillotina muy grande. Volteo varias veces hasta encontrar al pelinegro sentado a lado del dictador.

-TE AMO YOONGI -Grito el castaño mientras era colocado en la guillotina. El silencio reinaba. Hoseok cerró los ojos muy fuerte.

Solo bastaron unos segundos para que la gente gritara horrorizada, Yoongi no podía creerlo, salto del balcón en donde estaba. Los ciudadanos estaban corriendo por sus vidas.

El emperador Park DakHo había caído junto a su reinado.

Yoongi corrió hasta Hoseok, apartandolo de la muerte.

Abrieron sus ojos, no podían creer quien fue los asesinos del emperador.