Capitulo 1

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El sonido proveniente de su mesa de noche interrumpió sus sueños, Im Yoona abrió sus ojos pesadamente para encontrarse con una luz iluminando su cuarto.

Genial. Le había llegado alguna notificación de alguna de sus amigas, eso era lo que había perturbado su sueño.

Cerró los ojos y se volteó, dándole la espalda al causante de aquello, pero le fue imposible concebir el sueño, y más cuando su teléfono vibro de nuevo.

¿Quienes se empeñaba tanto en hablarle a altas horas de la noche? Podía ser alguna de sus amigas, preguntándole qué haría al día siguiente, pero no tenia sentido pues ya había hecho planes con ellas desde el día anterior.

Encendió el aparato, y se encontró con un mensaje de texto de alguien desconocido, algo que la hizo confundirse en un principio, pero, conforme leía el mensaje entendía lo qué ocurría.

-Hey, soy la chica del bar, ¿me recuerdas?-Decía el primer mensaje, y luego la tal chica mandó unos cuantos emoticonos-. ¿Cuándo repetimos la ocasión?-Decía el segundo, seguido de una carita guiñando un ojo. Yoona no sabía si enojarse o reír, sea quién haya sido la desconocida, parecía no haberle agradado mucho a su acompañante.

-Lo siento. Número equivocado-Cuando terminó de teclear la respuesta no pensó dos veces en enviarla y se quedo ahí, esperando la respuesta de la otra chica.

-Oh, yo... lo siento por molestar-Fue el mensaje que llegó de parte de la desconocida, Yoona suspiró sin saber qué responder, ¿podría decirle que no había problema y terminar la conversación? ¿O podría decirle que se sentía mal porque le habían dado un número falso?

Pero, ¿A ella qué le importaba? Estaba hablando con una completa desconocida que, tal vez, ya había borrado su número y la conversación debido a la vergüenza.

Entonces dejó su teléfono en la mesita de noche y se dispuso a conciliar el sueño de nuevo, pero algo dentro de ella no la dejaba en paz, sentía como si debiera contestarle a la desconocida.

Con un leve gruñido se levantó y agarró su teléfono, desbloqueándolo para encontrarse con la corta conversación que había tenido con la desconocida.

-No hay problema, a todos nos llega a ocurrir-Y mandó el mensaje, sintiéndose tonta después de hacerlo-. ¿A todos nos llega a ocurrir? ¿En serio, Yoona?-Se reprendió mentalmente, y dejó su teléfono a un lado para, por fin, conciliar de nuevo su tan esperado sueño.

Pero el sonido de su celular la hizo abrir nuevamente los ojos y mirar el mensaje que había recibido.

-:)

Era una simple y estúpida carita, pero logró hacer que aquel sentimiento en ella disminuyera, y por fin pudiera conciliar el sueño.

Esa noche, durmió con una sonrisa presente en sus labios.

Text (Yoona y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora