Escuchó la música y la siguió, llegando de nuevo hasta la pequeña esquina donde Hoseok bailaba. El castaño notó la presencia del pelinegro y sonrió, sus movimientos se hicieron más suaves pero ágiles, hacía algunas volteretas y acabó mientras colocaba sus manos en distintas partes de su cuerpo.
Las personas comenzaron a aplaudir y gritar, depositando billetes en el sombrero que se encontraba delante de Hoseok. El chico hizo una reverencia y las personas comenzaron a disiparse, excepto por Yoongi, quien seguía atónito por la presentación.
-¿Qué demonios te pasó en el brazo?- dijo Hoseok acercándose a Yoongi.
-Tuve un enfrentamiento, es una herida con una espada, no es nada.
-Estás sangrando, diablos, espera.
Hoseok corrió hasta tomar sus cosas, guardar el dinero dentro del sombrero y la pequeña bocina. Tomó a Yoongi del brazo y, con paso acelerado, llegaron hasta el departamento de Hoseok.
-Debes quitarte esta cosa- Hoseok señalaba la camisa de Yoongi.
-¿Mi jeogori?
-Como sea que se llame, debo curar tu herida.
Notando la desesperación en la cara del chico, haló el lazo que unía ambas partes del jeogori y lo retiró, dejando su pecho al descubierto. Eran dos chicos, no había nada de malo en eso, ¿no?
Hoseok observó el pecho de Yoongi, su piel era pálida y con tonos rosas, era tan distinta, parecía porcelana. Era hermoso. Miró al pelinegro quien le miraba expectante, trató de borrar cualquier pensamiento ilógico y comenzó a limpiar la herida con un poco de alcohol y algodón que había dentro de su apartamento.
Yoongi hizo una mueca de dolor, esa cosa dolía demasiado. Cuando terminó de limpiar la herida, Hoseok colocó una gasa y la vendó. Le indicó a Yoongi que lo esperara, desapareció por una puerta y salió con un nuevo conjunto de ropa.
-Voy a quedar sin ropa para usar si sigues apareciendo con hanbok- sonrió Hoseok.
-Prometo venir con tu ropa la próxima vez.
-¿Eso significa que planeas venir de nuevo?- sonrió Hoseok.
-Solo si tú quieres.
-Por supuesto- gritó el castaño con entusiasmo- Quiero decir, claro, si tú quieres está bien.
Yoongi sonrió, caminó hasta la habitación del día anterior. Notó que se trataba de la habitación de Hoseok, había una cama muy alta, con almohadas y sábanas. Un pequeño armario y un lugar para colocar zapatos, la habitación le pareció bastante cómoda. Sonrió al notar que las sábanas eran de distintos colores. Escuchó a alguien tocar la puerta y se apresuró a cambiarse.
-¿Todo bien?- preguntó Hoseok.
Yoongi abrió la puerta de la habitación y sonrió- Todo bien.
-Es hora de irnos, me gustaría que conocieras la ciudad.
Sin dar una respuesta, Yoongi fue sacado del departamento. Comenzaron a caminar, Hoseok le mostraba los pequeños rincones de Busan, explicándole como poco a poco Silla fue desapareciendo y como de pronto Corea se vio dividida en dos.
Yoongi también supo que Hoseok se fue de casa luego que su padre no lo apoyase con el baile, le sonaba un tanto familiar, su madre le dio dinero para marcharse y seguir sus sueños, desde entonces Hoseok baila en las calles para poder sobrevivir.
-¿Tienes hambre?- preguntó Hoseok luego de escuchar algunos sonidos provenientes del estómago de Yoongi.
El pelinegro había estado tan inmerso en la conversación que no notó el pequeño ardor en su estómago y los sonidos que este hacía. Hoseok caminó hasta un pequeño puesto de comida callejera, vendían salchichas cubiertas con papa, era un bocadillo rápido. El castaño le tendió una salchicha a Yoongi y le mostró como comerla.
-Esto es delicioso- dijo Yoongi terminando de masticar un trozo de su comida.
-Es uno de los mejores bocadillos callejeros, son una delicia.
Hoseok le tendió una coca-cola a Yoongi, el chico dio un sorbo y comenzó a toser, la bebida carbonatada no era lo suyo, sentía que su nariz ardía gracias al líquido, pero después de un tiempo, la disfrutó, tomando dos latas.
Se estaba haciendo tarde, por lo que decidieron regresar al apartamento de Hoseok, terminando de comer con un poco de estofado del día anterior. Hoseok encendió la televisión y pudo ver la cara de escepticismo de Yoongi.
-Se llama televisión y puedes ver distintos programas, desde animaciones- le mostró un canal para niños- hasta dramas –cambió el canal a KBS.
-Y no has visto la mejor parte- Hoseok se levantó para poner una película en el dvd, pero al girarse, Yoongi había desaparecido, tal y como la noche anterior.
El castaño colocó la película y se dedicó a verla solo, observando junto a él, con la esperanza que Yoongi apareciese mágicamente. Tomó su móvil y llamó a su mejor amigo, necesitaba contarle sobre esos tres días.
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Mystery of love 《YoonSeok》
FanficYoongi era curioso por naturaleza. Un día, su curiosidad lo lleva a toparse con el amor de su vida, solo que en una era y época diferente. ¿Será capaz de equilibrar ambos mundos?