Capitulo 6

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- ¡Mama! Tengo una noticia.

Subí rápidamente y le dije a mi mamá que ayudaría a la Sra.Tozier con Richie.

- ¿No crees que este raro que estén tu y el chico solos?
- Emmm... abra una enfermera.
- Esta bien. Quiero que te portes bien y te cuides sobre todo. Me tendré que ir temprano porque también ayudaré en la tienda y voy a suplir al gerente. En cuanto te despiertes estate lista para ir.
- Lo prometo.

Me fui a dormir. Esperaba con ansias el día de mañana.

{...}

Me duele la cabeza de una manera que ni me duele así en mis días...
Baje y tome una pastilla m, me serví un vaso con jugo de naranja y me tragué la pastilla. Iba subiendo las escaleras con la mayor hueva del mundo. Cheque el reloj.
La puta madre otra vez la 1:00 de la tarde. No entiendo que carajos sucede. Ando muy en la pendeja.
Me bañe, me puse una blusa cómoda y unos jeans negros y rotos. Mis tenis blancos y listo. Me peine bien, me arregle y espere a que dieran las 2:30.
Comencé a dibujar, pero antes puse una alarma en mi reloj para saber cuando daba la hora.
Dio hora y estaba a nada de acabar. Prefiero ver a Richie, así que me fui. Tome mi patineta y me acorde del día de ayer. Seguí el mismo camino del que aprendí. Antes de llegar vi un pequeño supermercado. Decidí comprarle algo a Richie para no llegar con manos vacías.
Compre un refresco y un pan cubierto de glaseado. Llegue al hospital, salude al doctor y me fui al cuarto. Escuchaba que Richie hablaba y al parecer lo hacía por teléfono.
Abrí lentamente la puerta y Richie no me escucho ni vio para nada. Me puse atrás de la pared que cubría la puerta de la habitación.

- No lo se Stan. Si lo se. Es que quiero hacer algo. Sonará loco. Si le quiero hacer algo bonito a ya sabes quien. No pendejo no es tu madre. Si, ella. Ha hecho muchas cosas por mi, y para que me tolere es inmenso. ¿Que carajos? Mierda Stan confiésalo. ¿QUE A EDDIE LE GUSTA? No mames. Que hago. Es qué tal vez si me quiera ella, pero no estoy seguro. No lo se... siento miedo. Bueno, hablamos al rato. Adiós. Ven a visitarme cabron.

¿Que carajos?
Si soy yo de quien estaban hablando que miedo.
Toque la puerta aunque fuera por dentro he hice como si apenas hubiera entrado.

- Ricardin pendejin.

Llegue.

- ¡Hola bonita!
- ¿Se ha ido tu madre?
- ¿Como sabes que se iba a ir?
- Tengo powers.
- Osopotamadre.

Reímos.

- Se supone que una persona iba a venir a cuidarme, ella esta en una junta sumamente importante.
- Puta madre entonces que hago acá...
- Espera... ¿que? ¿Tu eres esa persona? ¡No jodas! Amo a mi mamá.

Reí y me acerqué a la camilla.

- Toma, consentido. - dije dándole su pan y su refresco.
- Puta, te amo.
- Se aprecia.
- ¿Tu no a mi?
- No.

Recordé lo que dijo:
"Que hago. Es qué tal vez si me quiera ella, pero no estoy seguro."

- ¿Te agrada que haga yo esas bromas?
- ____, ¿son bromas?
- Vaya, me ha dolido.
- ¡No! Lo digo en buen pedo. Pensé que aveces lo decías porque en realidad lo sentías.
- Estas muy estúpido.
- ¿Si me quieres?
- No.

Reí y lo mire. Hice mi mano como un pico, acercándome a sus cachetes.

- Amo cuando haces eso.
- Por eso lo hago.

Termine apretándole los cachetes de nuevo.

- ¿Me puedes dejar comer mi pan?

Sarcasm. ~Richie Tozier y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora