Los débiles y cálidos rayos de sol atraviesan las delgadas cortinas de la habitación. El grueso edredón color turquesa se enreda alrededor de los dos chicos que duermen plácidamente, suaves ronquidos llenan el cuarto mientras afuera, puede escucharse el canto de los pájaros mezclado con el ruido de la ciudad.
Jaehyun abre los ojos pesadamente al sentir un rayo de sol justo en su rostro, pero no quiere levantarse aún, así que opta por darse la vuelta y tirar de la cintura a su pareja para acercarlo a él.
-Jae... - se queja el chico al ser molestado pero no abre los ojos y su respiración se vuelve suave de nuevo dándole a entender que ha vuelto a dormirse. Jaehyun acaricia el suave y delicado abdomen de su esposo mientras las puntas del cabello negro le hacen cosquillas en la mejilla.
Decide dormir un poco más al ser domingo, su único día libre de la semana, pero unas suaves pisadas lo hacen ponerse alerta y revisar el reloj, el cual marca que apenas son las 9:10 de la mañana. Suelta un quejido, rogando que las pisadas se detengan y todo se quede en calma por lo menos una hora más.
Sus súplicas parecen tener respuesta, pues después de escuchar la cadena del baño siendo jalada todo vuelve a quedarse en silencio en el departamento. Aliviado, lanza un suspiro y vuelve a tratar de conciliar el sueño.
Pero la calma se termina de forma brusca cuando la puerta de su habitación se abre con un crujiente sonido. Ante eso, cierra los ojos y hace su mejor esfuerzo por relajar su respiración y simular que todavía está durmiendo. Pasos familiares se acercan a su lado de la cama, él por supuesto trata de ignorarlos, pero su actuación se va a la basura cuando siente como unos pequeños puños lo golpean en la espalda, suelta un quejido y con toda la delicadeza con la que cuenta, suelta el cuerpo de su pareja y se acuesta boca arriba. Sabe que el niño debe estar viéndolo atentamente.
La sábana comienza a ser jalada junto con el edredón, oye débiles gruñidos que salen de la boca del pequeño mientras lucha por subirse a la cama.
-Papá – La dulce voz lo llama mientras las manitas pican y golpean su pecho. Abre los ojos, siendo recibido por la imagen de su pequeño sonriéndole mientras que el gatito de peluche le da besitos de buenos días. –Papá
-Buenos días Taehyun – murmura, aun algo atontado por el sueño, se endereza, apoyando su espalda en la cabecera mientras el niño se acurruca contra su pecho. Jaehyun pasa sus dedos por el suave cabello castaño pensando que es hora de un corte - ¿Dormiste bien bebé?
El niño asiente con la cabeza, mientras coloca su adorado peluche en las manos de su padre para levantarse y comenzar a dar brinquitos en la cama.
-Soñé que mi tío Yuta se perdía en el parque y tío Winwin lo dejaba ahí – comenta y ambos sonríen ante sus palabras, imaginarse esa cómica escena no es difícil. Sin embargo Taehyun para de saltar en cuanto escucha un quejido bastante familiar, Jaehyun alarmado coge al niño en sus brazos y se levanta con cuidado de la cama tratando de no causar mucho movimiento, habían echo mucho escándalo, así que lo mejor era salir rápidamente de la habitación y dejar dormir a su amor un par de minutos más o estaría de malas todo el día.
Taehyun se sostiene del cuerpo de su padre como si fuera un bebé koala, Jaehyun acaricia suavemente la espalda del pequeño mirando alrededor, juguetes y libros infantiles están tirados por toda la sala, tal vez pasarán la tarde recogiendo la casa o bien dejarán olvidado el desorden y saldrán a pasear a algún lugar. Espera hagan lo segundo.
-¿Tienes hambre gatito?
-Sipi
-Entonces comenzaré a hacer el desayuno.
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Morning call
RomanceLos domingos son para dormir y pasarse todo el día en cama. Pero para Jaehyun es exactamente todo lo contrario. One shot Jaeyong Family (ノ◕ヮ◕)ノ*:・゚✧