[Eldarya] Mi debilidad (Nevra x Leiftan)

Capítulo 13

Pudin de chocolate bañado en salsa dulce de fruta de "sauce del infierno", cortesía de Akire quien las había traído desde su pueblo, ella convenció a Karuto mediante sus encantos para que la dejara cocinar. Mientras mezclaba los ingredientes, aprovechó para agregar gotas de su poción en la salsa.

-Y la mejor parte es que no existe ningún antídoto - dijo Akire mientras sonreía complacida.

Mientras tanto

Leiftan abrazaba al vampiro quien descansaba entre sus brazos. Todas las preocupaciones de Nevra habían quedado en el pasado y allí se iban a quedar, aún seguía pensando que lo que le pasó a aquél chico fue sólo una muy rara coincidencia.

Era casi mediodía y se suponía que ambos estaban ocupados realizando sus actividades correspondientes, pero al aprovechar un descuido decidieron verse en la habitación del vampiro. Hasta que llegó la hora de la merienda y los dos se vieron obligados a levantarse de la cama.

-Ya es hora de irnos - dijo Leiftan moviendo suavemente a su ahora pareja.

-Es sólo la merienda, puede esperar - se quejó Nevra aferrándose al cuerpo de Leiftan.

-Pero entonces Miiko notará nuestra ausencia y vendrá a buscarnos - insistió nuevamente.

Nevra lo pensó un poco mejor y finalmente aceptó levantarse de la cama,Leiftan procedió a hacer lo mismo para luego buscar su ropa.

Cuando ambos estaban totalmente arreglados salieron de la habitación del vampiro para luego dirigirse a la cantina, cuando llegarón encontraron que estaba totalmente llena, lo cual era raro a no ser que sea día festivo y el menú sea algo extravagante.
Pero hoy ni era festivo y Karuto ni siquiera había anunciado algún platillo exótico.

Afortunadamente una mesa estaba siendo desocupada y rápidamente la ocuparon antes de que alguien más lo haga.

-¿Qué creés que está ocurriendo? - Preguntó Nevra.

-No lo sé, Karuto ni siquiera anunció que haría algo especial - contestó Leiftan mirando lo que todos estaban comiendo.

Al poco tiempo llegó Akire con dos platos de... ¿Pudin?

No se veía como la cosa más extraordinaria del mundo.

-Hola chicos ¿Ya probaron el pudin? Lo hice especialmente para la guardia de Eel y usé la receta secreta de mi abuela - dijo Akire sonriendo mientras dejaba ambos pudines frente a los chicos.

-Se ve delicioso - dijo Leiftan amablemente.

-Sí... Delicioso... - Nevra miró el simple platillo con algo de desconfianza.

-Y esperen a probar la salsa - Akire se sentó en medio de los dos, abrió un frasco con un espeso líquido color caramelo y bañó el pudin de Leiftan.

-Yo también quiero - Pidió Nevra al ver la salsa.

-Oh... Lo lamento mucho, se me terminó - se disculpó Akire vertiendo toda la salsa en el pudin de Leiftan.

-Eh... Pero... - Leiftan miró con rareza a la chica que ahora tomaba un tenedor y cortaba un pedazo de pudin.

-shhh... No digas nada y come por favor - ella insistió poniendo su mejor cara de cachorro.

Leiftan miró de reojo al vampiro quien sólo los observaba sin saber tampoco como reaccionar, entonces cedió ante la petición de la chica, sólo era pudin después de todo.
Ante la mirada insistente de Akire, probó el pequeño trozo de pudin, era bastante dulce y la salsa sólo resaltaba mejor el sabor.

-Está delicioso - dijo Leiftan con total honestidad.

-Me alegra que te guste - contestó Akire con una sonrisa.

Ambos se miraron a los ojos, los ojos color ámbar de Akire brillaron era un brillo hipnótico que a Leiftan lo hizo caer en trance.
Sintió una gran atracción al momento de cruzar sus ojos con la mirada de ésa chica, era la misma sensación que sentía cuando veía a Nevra pero con mayor intensidad.

Nevra sintió que algo no andaba muy bien así que decidió intervenir.

-Leiftan ¿recuerdas que prometiste ayudarme con una misión? - Nevra esperó reacción por parte del chico.

-Eh... Sí, sí ya me acorde... - Leiftan apartó la mirada saliendo de su trance - lo siento mucho, pero debo irme... Pero estaba delicioso, enserio - dijo al momento de levantar.

-Cuando gustes - contestó Akire.

Nevra tuvo casi literalmente que llevarse a rastras a Leiftan quien no paraba de mirar a esa chica.

Akire sólo sonrió victoriosa al ver su cometido cumplido, sólo era cuestión de algunos pequeños encuentros para que Leiftan sea verdaderamente suyo.

-pronto obtendré todo de tí, querido - Murmuró la chica observando como ambos chicos salían de su campo de visión.
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Hasta aquí el capítulo de hoy n.n

¿Alguién más quiere matar a Akire? xD