[Brendon's POV]
Dicen que en cada historia hay dos versiones. Bueno, en realidad 3. La de T/N, la mía y la verdad. Pero para entenderlo todo debo volver a recordar toda esta tarde y no ayuda ir por la quinta cerveza. Pero quizás me ayuden a digerir la traición que he descubierto hoy.
Hoy acababan las grabaciones del CD, tenía unas breves vacaciones de a penas cuatro días antes de empezar con el lanzamiento del single y promos por todas partes. Y no puedo evitar ya que One of a kind sea el primer single...
T/N llevaba rara unos días. Nos hemos ido viendo a ratos en mis pausas de estudio. La notaba algo tensa, como si algo la torturase. Hoy lo he entendido todo. Eran los remordimientos.
Dejo mi cerveza en la mesa y me hundo más en el sofá. El mismo sofá que tan buenos momentos nos ha dado a ella y a mí. Saco el papel de liar y tabaco.
¿Cuánto hace que no fumo tabaco solo? Buah, qué más dará.
Se me había ocurrido aprovechar mis días de fiesta y el día de las lágrimas de San Lorenzo para pasar la noche con ella en Brighton. Tenía mi discurso mental en la cabeza. El plan era fácil. Pedirle que me acompañase a algunas promos de Estados Unidos y aprovechar para que conociese a mi familia.
Formalizar las cosas. Por que creía que era de fiar.
Eso creía.
Termino de liar mi cigarrillo y lo enciendo. Miro al infinito y me vuelvo a sumergir en el día de hoy.
Sabía que Sarah estaba en Londres para recoger sus cosas de Harrow. Me lo habían dicho Zack y mi abogado. Sólo la llamé por teléfono antes de ayer para ponernos de acuerdo sobre cuando iba a venir el camión de la mudanza a por sus cajas, ya que yo había cambiado la cerradura de la puerta para evitar sorpresas.
Y vaya si las tuve.
A las cuatro y media de la tarde abrí la puerta y en vez de encontrarme a los trabajadores que habíamos contratado, me encontré a Sarah, con cara suplicante.
-¿Qué haces aquí? - pregunté sin ocultar mi sorpresa.
-Hola....Brendon- susurró, como si estuviera avergonzada- he alquilado la furgoneta para venir a recoger mis cosas, ¿Me dejas pasar?
-Habíamos acordado que mandarías a alguien. Acaba rápido lo que tengas que hacer.
No pensaba ayudarla. Me senté en el sofá mirando mi teléfono mientras ella iba y venia con sus cosas.
Sarah iba cada vez más lenta y me estaba poniendo nervioso. Tocaban casi las cinco. Menos mal que le dije a T/N que viniese a las cinco y media. Estaba a punto de ayudarla a descargar, para perderla de vista lo más rápido posible.
Sarah se lleva la última caja y la guarda, pero en vez de irse se sentó a mi lado, mirándome, llorosa.
-¿Cómo están Penny Lane y Sinatra?-pregunté fríamente mientras maquinaba una manera de quitármela de encima.
-Bien... Están muy juguetones.- contestó, distraída.
Sonó el reloj, las cinco.
-Genial. Ya te veré para firmar los papeles.-hice ademán de levantarme para acompañarla a la puerta pero ella me cogió de la mano y me volvió a sentar.
-Te echo de menos, amor mío.-me susurró, clavando sus ojos azules en los míos- aunque hayas rehecho tu vida temporalmente, yo siempre seré tu gran amor.
¿De qué cojones está hablando?, pensé.
Cuando me di cuenta había clavado sus labios en los míos. Esos labios que había besado durante casi 10 años, pero no me gustan. Fui a apartarme cuando oí que la puerta se abría.
-QUÉ.-chilló una voz demasiado conocida para mí.
Me separé al momento. Es T/N. Joder, me comí la cabeza pensando cómo podría explicárselo sin que me malinterpretase.
-T/N, déjame que te explique...-murmullé.
-No hay nada que explicar, Brendon.
Estaba tan seria que no sabía dónde meterme.
-Oh, tu eres T/N, ¡mi amiga por correspondencia!-dijo Sarah, con una alegría muy extraña en esos momentos.
A T/N se le congeló la mirada, podía ver cómo se estaba aguantando las ganas de llorar.
-¿De qué coño hablas, Sarah?- pregunté con cara de desconcierto.
-Se acabó, Brendon- sentenció T/N- no voy a aguantar esta mierda.
Al acabar de decir esto salió por la puerta como un rayo. Y yo me quedé paralizado. No entendía nada. ¿Amiga por correspondencia?
-Verás amor mío- empezó Sarah y oí el ruido de la moto de T/N.
-No me llames así- interrumpí, ya enfadado.
-Bueno, Brendon Boyd Urie- prosiguió con sorna - cuando te fuiste de casa por mi pequeño desliz sin importancia...
-Fueron unos putos cuernos, Sarah.
-Lo que tú digas. Conocí a T/N después de que os conocierais en el programa y le ofrecí dinero para que te conquistase y luego te rompiera el corazón. Así verías que al fin y al cabo quién mejor te ha tratado en tu vida he sido yo.
-Mientes.- respondí, al borde de un ataque de nervios.
-¿Ah sí?- inquirió coqueta, levantando una ceja- entonces... ¿Por qué tengo la dirección de su casa en el barrio del Soho? Le mandaba cartas con instrucciones cada dos semanas. Lo que pasa, es que la cosa se empezó a torcer cuando se enamoró de ti y empezó a pasar de mis órdenes. Bueno, enamorar es muy fuerte... Digamos que se ha encariñado contigo y le dabas pena.
-Vete, Sarah.
-Ya volverás conmigo cuando veas que tengo razón. Y volveremos a ser la misma familia feliz que hemos sido siempre.
Sarah se fue tranquilamente y hundí mi cabeza en mis manos, echando a llorar a moco tendido.
Miro el reloj después de apagar mi cigarrillo y son las cinco de la mañana. En el cielo, ya hace horas que han llovido las estrellas.
Me limpio con la mano una lágrima, mía, real que cae. Qué tonto he sido.
¿Cómo me has podido hacer esto, T/N?
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Victorious (Brendon Urie y tú)
FanfictionT/N trabaja en un late show en Londres. Al llegar al trabajo, un día se encuentra que le toca estar codo a codo con el cantante de Panic At the DIsco, Brendon Urie. T/N no quiere sentir nada por un famoso, pero no será tan fácil como piensa. No se a...