- Y aquí estoy Lucy, debería haberte visitado hace mucho, pero, es que, bonita, verte así me mata, va... lo que me destroza es que, aunque hable por mil horas, sé que no me vas a escuchar. Es difícil, por no decir imposible, que lo hagas. Tres años, eh!, tres años de no escuchar tu risa ruidosa, esa que se escuchaba desde la otra cuadra, tanto tiempo y a la vez nada. El que te perdieras de esa manera nos destrozó, lamento no haberlo visto. Luz de mi oscuridad. Y es que eso éramos, vos la luz y yo la oscuridad, que se sentía menos opaca a tu lado, perdón por no haber visto tu luz apagarse Lucy.-
Toco el mármol frío, que indica que ella está aquí y más lágrimas caen, dejo salir un largo suspiro mientras me levanto y me alejo de su tumba.
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Tu Escrito Roto
Short StoryUna señora mayor que un día conocí me dijo que escribiendo vivias aun más, gracias a ella hoy te escribo a ti.