(Parte única)

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La noche del sábado se notaba en las calles de Seúl, mucha gente se preparaba para salir, muchas mujeres listas para cazar a un hombre, pero quien más se iba a hacer notar esa noche era Victoria.

Terminó de pintar su labios de un rojo fuerte y se dirigió al espejo de cuerpo completo para verse. Impactaba con sus botas negras hasta las rodillas y un vestido morado al cuerpo, mientras que lucia su cabello azabache corto y lacio.

Tomó su bolso y salió a la ciudad, esa noche estaba más que preparada.

Se escuchaba el sonido de los tacones contra el suelo con cada paso, su andar con tanta confianza y poder llamaba la atención, en especial de alguien que la vio pasar y quedó hipnotizado con la belleza de Victoria, tanto así que sus pies se movieron en la misma dirección que ella, no trataba de acosarla o algo así, no entendía por qué su cuerpo se movía sólo.

La siguió hasta un club nocturno bastante popular, lo conocía, es decir ¿Quién no conoce “Tentation”? Ya dentro, y con mucho esfuerzo ya que no era tan fácil entrar a ese club tal y como la chica lo había hecho, la vio en la pista bailando, su cuerpo se movía tan seductoramente pero con elegancia. Estaba cayendo por esa chica.

Después de estar largos minutos viéndola decidió acercarse, justo cuando estaba llegando la perdió y las luces no ayudaban para nada en la búsqueda. Rindiéndose fue hacia la barra por un trago, tomó asiento pesadamente y cuando se acomodo exhaló como si todo el aire que tenia dentro pesara.

-Hola- escuchó a su lado una voz femenina. Giró y observó a aquella muchacha que lo hipnotizó. Con una calma falsa sonrió.

-Hola- respondió.

-Deduzco que eres chino, por tu acento.

El chico asombrado asintió.

-Me llamo Songqian- le tendió la mano en forma de saludo, cuando el la estrecho la chica se acercó hacia su oreja con rapidez- pero si quieres dime Victoria- su voz sonaba seductora.

-Soy Zhoumi- intentaba parecer tranquilo y desinteresado pero el nerviosismo ganaba.

-Encantador- sus labios rojos formaron una media sonrisa y su mano se había posado en el muslo del muchacho seguido de unas caricias leves.

El cuerpo de Zhoumi comenzó a calentarse, no sabia como reaccionar.

-Vamos a bailar- Victoria tomó la mano del chico y lo arrastro hacia la pista, Zhoumi se quedo paralizado cuando vio como ella comenzaba a bailar seductoramente, sus ojos estaban viéndose directamente. Intentó seguir el ritmo apegándose más al cuerpo femenino, se dejo llevar por ella y disfrutó el momento.  El baile aumentaba la sensualidad, sabian que esto iba a ir más lejos.

-¿Quieres ir a algún lugar más privado?- Victoria tomaba la iniciativa de nuevo, acercando sus labios a los del chico, quien asintió rápidamente.

Zhoumi sintió como su mano fue tomada y la chica lo dirigía a un lugar desconocido, corría con una sonrisa en su boca, ella le hacia sentir cosas que nunca antes y esperaba volver a sentirse así con ella el mayor tiempo que le fuera posible.

Llegaron a un edificio lujoso que parecía ser un hotel, no lo reconocía y le resultaba raro porque solía ir por esas calles, le resto importancia y entro mientras Victoria se encargaba de todo.

La puerta de la habitación fue abierta y Zhoumi quería admirar lo grande y lujoso que era pero no alcanzó ya que la chica se había abalanzado a el para besarlo, tomó las piernas alrededor suyo con firmeza y se fue acercado a la cama.

Victoria bajo sus piernas para pisar el suelo, desabotonó, casi arrancó, la camisa del chico y observo detalladamente su cuerpo.

-Eres muy sexy- lo empujó hacia la cama y seguía mirándolo como si fuera a comerlo.

-Ven aquí- exclamó Zhoumi desesperado por probar un poco de la azabache.

Victoria se acercó a el gateando seductoramente, bajo su trasero sobre el miembro ya erecto y recargo todo su cuerpo, comenzó a moverse provocando que un suspiro saliera de la boca de él. Sus labios aun rojos fueron a parar al cuello comenzando a repartir besos. La intensidad aumento cuando Zhoumi sintió mordisqueos, pero no eran exactamente de placer, sentía mucho dolor.

-Vic, me lastimas.

La chica se alejo y vio la cara de asombro de él al notar que el rojizo de sus labios no era precisamente labial.

Una gota de sangre cayó en su pecho y el dolor de su cuello no paró. Dirigió rápidamente su mano hacia la zona dolida y sintió mucha sangre abundar ¿Qué mierda estaba pasando?

Iba a exclamar aquello pero lo siguiente que sintió fueron unas tijeras sobre su pecho.

-Mmh, estoy disfrutando mucho esto- Victoria siguió con los movimientos sobre el miembro mientras apuñalaba una y otra vez a su presa. El solo gritaba de sufrimiento, le tapo la boca porque ya se estaba irritando- Shh, no arruines el momento.

Los gritos cesaron pero no por la petición de la muchacha, sino porque Zhoumi ya se encontraba sin vida.

Victoria fue al baño a limpiar su boca y manos llenas de sangre, retocó su labial y salió del edificio abandonado en ruinas en busca de una nueva presa.

Tentación «Zhoutoria»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora