LA UNIVERSIDAD (PARADA TEMPORALMENTE)

Capítulo 9: No me digas lo que quieres, solo dime lo que te importa

Se levantó y se alejó de mí, como si tuviera sida. ¿Qué he hecho ahora? Ella fue la que empezó, ¿no? Dios, esta chica me está matando.

La agarré de la muñeca y se giró, me miró triste y con… ¿miedo?

-¿Qué te pasa? ¿Por qué te alejas?-dije con frustración.

Ella suspiró entrecortadamente y me miró seria.

-Porque me queréis entregar a los Krvi (vampiros de sangre real)-hizo una pausa-Y moriré, y yo no quiero morir-soltó en un sollozo.

Yo me levanté de inmediato y la abracé, ella aceptó mi abrazo y sonreí.

-No te preocupes, nosotros te protegeremos-hizo una leve pausa-Yo te protegeré con mi vida-le susurré.

Ella me miró y sonrió. Yo la tomé del mentón para que me mirara a los ojos y le limpié las lágrimas con mis dedos.

Sin duda esta chica iba a ser mi perdición.

De pronto entró Javi y me separó de ella.

-Tenemos un problema-espetó serio-Marlen no quiere colaborar con ella, a no ser que la estudiemos y sepamos cuáles son sus dotes y lo que puede llegar a hacer-suspiró-Sino habrá que matarla-explicó apenado.

Ashley se estremeció y el bello de su piel se erizó.

-No, la estudiaremos a fondo y veremos que puede hacer con el tiempo, mientras tanto dile a Marlen que el plan sigue igual que antes solo que con unas leves modificaciones-espeté juguetón.

La verdad es que me encanta la idea de estudiar a fondo a Ashley…sobre todo al fondo de su ropa.

-¿C-cómo que estudiar a fondo? ¿Qué significa eso?-preguntó con temor.

-Tranquila, no te vas a tener que quitar la ropa a no ser que tú quieras-murmuró Javi travieso.

Ella frunció el ceño.

-¡Estáis mal de la cabeza!-gritó furiosa, y se fue cerrando la puerta de un portazo.

En cuanto se fue, Javi y yo nos pusimos a reírnos a carcajadas.

-¿Qué sugieres que hagamos?-me preguntó Javi poniéndose serio.

Yo le miré pensativo.

-Sugiero que nos turnemos para dormir con ella y para estar con ella, porque así podremos descubrir más acerca de ella-espeté sin mirarlo.

Él asintió.

-Buen plan, pero nosotros no dormimos-dijo obvio.

Yo le miré y esbocé una sonrisa pícara.

Sí, ya sé que soy bipolar y un capullo, pero es que esta chica me vuelve loco.

-¿Vamos a avisarla?-preguntó Javi emocionado.

Asentí y salimos por la puerta a toda velocidad.

Entramos en su habitación, pero no había nadie, ni rastro de Natalia ni de Ashley. Aunque Natalia ya sabía dónde estaba, pero Ashley ni idea.

-Hey, la luz del baño está encendida, y la puerta está medio abierta… ¿nos asomamos?-me susurró divertido Javi.

Yo asentí con una sonrisa.

Fui yo el primero en asomarme. Ella estaba en ropa interior mirándose en el espejo, al parecer se miraba las quemaduras que le habían hecho el collar de la cruz cristiana.

Era tan tierna e inocente…dios, me encantaba.

-Hey, tío, ¿qué ves?-preguntó nervioso Javi.