Anything Goes [Axl Rose Y Tú]

Capítulo 25

Yo: ¿Te vas a casar?.

Axl: Sí, quería invitarte. Por supuesto que si no querés ir, lo voy a entender. Pero sería muy especial para mí que estuvieras ahí. - me quede unos segundos en silencio.

Yo: Bueno, Axl, voy a serte sincera. Tengo que pensarlo, no es fácil... - me distrajo mientras hablaba.

Axl: Claro, claro. Lo entiendo perfectamente. En serio, si pensas en ir, la ceremonia empieza a las 20, en la iglesia. Espero que puedas ir. - dijo sonriendo. Lo único que hice fue sonreírle también. - Nos vemos. - me dió un beso en la mejilla, creo que ambos lo sentimos especial, ya que lo hizo lentamente, y si no, tal vez solo es un hijo de puta que le gusta tentarme.

Luego de todo el festejo, llegué a mi casa y me tire a la cama a dormir. Me quedé dormida pensando en todo lo que había pasado con Axl, no solo lo de hoy, sino que reflexione acerca de todo lo que habíamos pasado juntos. Sentí una enorme nostalgia.

-

Al día siguiente, como era sábado, no me tocaba trabajar. Así que tuve todo el día libre. Libre para decidir que iba a hacer en cuanto a la boda de Axl. Ir o no ir. No sé, lo estoy pensando mucho.
Si voy no solo me voy a sentir una estúpida por estar viendo al hombre que amé como avanza, mientras yo estoy sola y probablemente verlo con ella me haga extrañarlo. Además, tal vez si la chica sabe quién soy, le voy a causar problemas.
Si no voy, me voy a sentir mal porque él quería que fuera, y no quisiera eso, aunque dudo que yo sea su principal prioridad en su lista de invitados. Además, quedándome acá tal vez este toda la noche llorando y pensando en los bueno momentos que pasamos juntos. No sabía qué hacer.

Luego de haber pasado muchas horas decidiendo, mientras fui a comprar cosas, mientras comía, mientas limpiaba, mientras tocaba la guitarra e incluso cuando fumaba, decidí que no iría. No sé bien por qué, incluso no sabía si estaba segura, pero creo que era lo mejor para mí para seguir avanzando. Bastante me costó olvidarme de el como para ir a su boda y deprimirme por ver a esa chica y pensar que no soy yo. Aunque, en realidad, la idea de casarme jamás me atrajo. Pero igual, me haría sentir mal por no ser yo la que reciba su atención y amor.

Allí estaba, tenía puesta una remera larga algo vieja que tapaba un poco mi culo, en bombacha y con el pelo recogido mientras fumaba y me preparaba un porro grande mientras miraba una película. Miraba el porro, y miraba ma habitación. No podía creer que siquiera lo estaba considerando. Estaba dudando. ¿Por qué siempre hago lo mismo a último momento?, ¿Voy o no voy?.

Yo: A la mierda. - dije a mi misma, mientras me paraba del sillón e iba corriendo hasta la habitación.

Me fijé la hora en el reloj. Son las 19.45, es tarde, pero no importa. Ahora ya está, voy a ir. Lo tengo decidido, ahora sí.

Rápidamente fui al baño y me lave los dientes, me planche el pelo para dejarlo suelto y lacio, me maquillé los ojos con rimel y delineador negro, para que resaltaran, me puse brillo en los labios. Fui hasta el placard para sacar un vestido:

Me puse un poco de perfume, y salí.

Mientras caminaba hacia la iglesia, en mi mente pasaban recuerdos con Axl: cuando me espió por la ventana, cuando me hablo por primera vez yendo para el colegio, cuando nos peleamos, cuando fui a su fiesta, nuestra primera vez, cuando nos juntabamos a escuchar música juntos y bailabamos, cuando mirábamos películas y comíamos como cerdos frente al televisor, probando drogas juntos, cuando lo acompañe de gira... No voy a mentir, sentí muchas ganas de llorar. Me sentía patética de nuevo, me resultaba triste que después de todo lo que pasamos, el se termine casando y yo yendo a su boda, recordando los buenos momentos juntos. Soy patética. Pero ya no hay vuelta atrás, estoy frente a la iglesia.

Lo dudé por unos segundos, pero no hice todo esto para nada. Ya está, entra de una maldita vez, Aria.

Entré, todos estaban sentados, pude ver a los chicos delante de todo. En el medio, estaban los novios. Aunque yo solo podía ver a Axl, y lo bien que lucía con traje, aun así lo prefiero con sus jeans rotos. Otra vez esa nostalgia.
Axl y su novia se miraban sonrientes, todos los miraban sonrientes también. Yo estaba al fondo de todo, detrás de la gente, para que nadie me viera.
Axl miró para donde estaba la gente, miraba a todos sonriendo, y me miró a mi, o al menos eso creo. ¿Me está mirando? Mierda, me estaba mirando, y sonrió. Creo que fue solo un segundo, aunque lo sentí una eternidad, y volvió a mirar a su novia.

Cura: Señorita Erin. Ahora le voy a pedir que repita lo que digo. - la chica asintió con la cabeza - Yo, Erin.

Erin: Yo Erin.

Cura: Te elijo, Axl.

Erin: Te elijo, Axl.

Cura: Para estar juntos tanto en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte nos separe.

Erin: Para estar juntos tanto en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte nos separe.

Que cursi.

Cura: Ahora Axl, repita después de mi. - Axl asintió. - Yo, Axl.

Axl: Yo, Axl.

Cura: Te elijo, Erin.

Axl: Te elijo, Aria.

¿Aria?, Dijo Aria. ¡Dijo mi nombre!, ¡El hombre se está casando y acaba de decir mi nombre en el altar!, ¿Que hago?, ¿Debo irme?, Es muy obvio. No sé qué hacer, abrí los ojos como platos al escuchar mi nombre. Todos se quedaron callados, sorprendidos, algunas viejas cuchicheaban. Erin lo miraba confundida, con los ojos abiertos, poco a poco esa cara fue cambiando a una de enojo, casi de furia. Creo que no es para menos. Axl solo se quedó ahí con los ojos abiertos, mirando al cura y a Erin.

Axl: Erin, dije Erin. - dijo sonriendo y ella lo miró tan mal que la tensión se hizo aun más grande.

Los chicos giraron sus cabezas, y cuando vieron que yo estaba ahí hicieron una cara de "Oh, mierda".

Cura: ¿Debo continuar?. - otro silencio. Axl miraba a Erin como perrito mojado.

Erin: Sí. - dijo cortante.

La ceremonia continuó normal, o lo más normal que se podía luego de eso.