Capitulo 23- (Parte 2)

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ANNA

Lo mire a Alex esperando a que dijera algo, después de todo creo al menos debería presentarnos.

-Anna, ella es Elif Boyer presidente de la Fundación Amar para la protección de niños huérfanos que funciona en todo el país.- dijo mientras me daba espacio para que la viera.- Elif, ella es Anna mi... prometida.-

Todavía le costaba decir esa palabra y eso que había pasado un mes desde que confirmamos que seriamos parte del circo.

-Es un placer Anna.- contesto Elif y estiro su mano para estrechar la mía.- Lo estaba invitando a Alexander a la gala anual que hacemos a beneficio de la fundación en la cual participan los principales empresarios. –

-Por supuesto, ahí vamos a estar.- dije con la sonrisa más falsa que puse jamás.

-Este año decidimos hacer una subasta para recaudar más fondos y nos encantaría que participen.-

-Eso es seguro.- dijo Alex. –BellaDonna colabora con la fundación hace muchos años y siempre es un honor que nos inviten.-

-Desde AMAR estamos muy agradecidos. Si me disculpan, tengo algunos detalles que ultimar, que pasen un buen día. – dijo y se fue.

Nos quedamos en silencio por unos segundos hasta que decidí entrar en su oficina, el caminó atrás mío y cerró la puerta. 

-Estoy esperando que me expliques.- dije cruzándome de brazos.

Fue hasta un cajón y tomo mi teléfono.

-Tomá.- y me lo dio.- El video ya no está, asique no lo busques. Y no me mires como si fuera culpable de algo porque nos estoy haciendo un favor a los dos, es cierto que a mí no me deja bien parado pero si alguien encuentra eso en tu teléfono tampoco te va a favorecer. ¡Ah! También había algunas fotos tuyas, te ves linda cuando sonreís, deberías intentarlo más seguido y no ser tan amargada.- dijo.

-Voy a tomar tu consejo, "rey de la risa". -  dije con sarcasmo.-Quiero que sepas una cosa Alex, esto que hiciste no va a quedar acá. Puede que esta vez hayas conseguido salirte de este problema pero creeme que no voy dejar que sigas haciendo tu vida como si yo no formara parte de ella, porque para que te vayas enterando, vos me metiste en tu vida el día que me pediste que nos casemos. Porque si no te acordas la noche que nos reencontramos fuiste vos el que me propuso que hagamos lo que nuestros padres querían, y hace cuatro días atrás volviste a pedirme que sigamos con esto, asique es hora de que vayas asumiendo que si hoy estamos acá es porque ambos lo permitimos ¿sí?-

Luego de eso ni me detuve en ver la expresión de su rostro, solo me fui por donde había entrado.

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Llegue a mi cuarto y me tire en mi cama, una noche que pasaba sin ella y ya la extrañaba. Por un momento desee quedarme todo el día acá dentro, lejos de los malos comentarios de la gente, de las mentiras y los engaños en los que vivía últimamente. Pero no podía, tenía solo algunos minutos para volver a la empresa porque lo último que quería era que además de lo que ya se decía de mí también todos pensaban que realmente no importaba mi trabajo.

Luego de darme una ducha de agua caliente que necesitaba volví a mi habitación para elegir mi ropa. Me puse unos pantalones oscuros, una blusa blanca escote en v con un pequeño bolado abajo y lo convine con un collar plateado. Deje que mi cabello se secara solo para que se formaran algunas ondas y me hice el maquillaje natural de siempre que simplemente es a base algo de polvo y un poco de rímel para levantar mis pestañas.

Cuando termine tomé una chaqueta gris y me la puse porque, si bien ya no llovía, todavía había ráfagas de viento.

Estos son los momentos en los que deseaba tener un auto porque en los días así era tan difícil conseguir un taxi, que creo que prefería caminar a tener que esperar cuarenta minutos.

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⏰ Última actualización: Apr 08, 2018 ⏰

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Casada con mi EnemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora