25. "Anhelaciones"

132 2 0
                                    

Anhelo con todas mis fuerzas no despertar.

Anhelo regresar a casa, con mis padres.

Anhelo volver a tener la vida simple que llevaba antes.

Anhelo nunca haber entrado a ese cuarto.

Anhelo nunca haberme enamorado 

Y anhelo jamás  haber conocido  a Christopher Vélez.

Ahora entiendo eso que los demás  dicen de que  el amor sólo trae dolor.

No me dolió el golpe en mi cabeza, lo que me dolió  fue el corazón.

El amor nos hace débiles.

Jess pov

Estaba corriendo  con Tn por el pasillo,  en busca de Erick y Christopher.

Entré sin avisar al cuarto donde supuestamente estaban, y desearía nunca haber  entrado.

El impacto al ver el novio de mi mejor amiga teniendo literalmente sexo com ropa com otra chica, fue demasiado.

El bote de nutella que tenía  entre mis manos, cayó al suelo.

- Hey, Jess, no están  ahí Erick. - dice Tn acercándose  a mi. - Y Christopher  -susurra lo último para caer donde se derramó la nutella y golpearse la cabeza.

Christopher y la perra con la que estaba, aún   no se habían  dado  cuenta de nuestra presencia.

No hasta que me bajé al suelo sosteniendo  la cabeza de Tn entre mis brazos, llorando  y gritando por ayuda.

- ¡Ayúdame, Erick! -Grité lo más  alto que pude. -¡AYÚDENME HIJOS DE PERRA! -Grité más  fuerte aún   hecha un mar de lágrimas.

Tn se golpeó la cabeza fuertemente  y está  perdiendk mucha sangre.

En ese momento se aparecieron Zabdiel, Erick, Richard y Joel junto a renato frente a mi.

Christopher se paró inmediatamente  de la silla donde estaba, intentando acomodarse la camisa desesperado.

- ¡Pero que diablos pasó! -Grita Christopher acercándose.

- ¡Aléjate, maldito infeliz!  - le grité señalándolo con un dedo. - Llama una ambulancia  por favor, Zabdiel.

- ¿Qué paso, Jess? - dice preocupado y desesperando Richard

- les contaré  luego.

Cinco  minutos después, llegaron los paramédicos.

En un mar de lágrimas abracé cln todas mis fuerzas a Erick.

-Ella no me puede  dejar... -susurro. - ella no me puede hacer esto.

Christopher  quien  ahora está  hecho un mar de lágrimas, habla.

- Déjenme ir con ella. - les insiste a los médicos.

-No tiene pulso. -le dice uno de los paramédicos  al otro.

Inmediatamente  instalan unas de esas cosas que cuentan los latidos del corazón.

La máquina empezó a hacer un pitido  fuerte. "PIIIIIIIIIIIII"

-¡NO!, sálvela, ella nl me puede dejar. -grita Christopher.

- Hasta que por fin le llega la hora a la mosquita muerta. - dice la chica con la que Christopher estaba hace unos minutos. -Chris, ¿no quieres venir a que te vuelva  a dar cariño?

- ¡Hija de perra! - grito entre  lágrimas y me lanzo sobre ella. - Hoy la muerta serás tú.

Los paramédicos  se llevan a Tn con Christopher, Joel, Renato y Zabdiel, mientras que Richard y Erick tratan de separarme de Stephanie para no matarla.

El uno para el otro  (Christopher Vélez y Tú) HOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora