Una semana.
Tan sólo había transcurrido una semana cuando los resultados de aquella crema misteriosa se hicieron visibles.
La piel de Anyca estaba irritada; con prominentes protuberancias en su rostro. El acné se había potenciado al máximo. La cara le ardía y el dolor era insoportable.
"¡Jesucristo! ¡Anyca! " Suni ingresó al baño al sentirla llorar desesperadamente.
No sólo eran lágrimas de tristeza, sino también de arduo dolor. La escena que Suni contempló no era nada agradable. El envase de la crema se hallaba casi vacío, volcado en uno de los rincones del cuarto de baño. Sobre el lavabo, bollos de papel arrugado, recubiertos por lo que parecía ser sangre. Y luego Anyca. Ella estaba sentada en la tina de baño, mientras sostenía otro trozo de papel sobre su rostro, el cual también se hallaba teñido de aquel líquido rojo.
"¡¿Qué ha sucedido?!" La asiática sintió que lloraría. Se colocó de cuclillas a su lado y comenzó a acariciar su espalda, casi temblando. "Traeré alcohol y-"
"¡No!" Anyca soltó un alarido que provocó que Suni se sobresaltara. "¡Dame la crema! Me pondré más y todo se solucionará." La latina intentó incorporarse con el fin de ponerse de pie y tomar el envase. Pero su compañera no soportó que la chica no abriera los ojos y continuara a creer que eso le hacía bien. Tomó su hombro y de manera brusca la volvió a recostar sobre la tina.
"¡Anyca, despierta!" La latina continuaba a llorar. "¡Esa crema lo único que hizo fue empeorar tu piel!" Suni se sentía desesperada. "¿Quién te la dio?" Anyca parecía no querer hablar. Simplemente bajó la mirada e hizo una mueca de dolor al mover las facciones de su rostro. "¡Dilo de una vez!" Exigió Suni pegando un grito.
"¡Hye!" Anyca volvió a sollozar. "¡Fue Hye! ¡Ella fue quien me dio a crema!"
"¡Lo sabía!" Suni se sentía hervir en rabia. "¿Acaso eres estúpida? ¿Acaso creíste que luego de lo ocurrido el primer día ella sería amable contigo?"
"L-lo siento." Anyca respondió en un susurro.
"¡No lo sientas idiota!" Gritó Suni nuevamente. "¡Debes ser más precavida!" Suni colocó alcohol en un algodón y se acercó al rostro de Anyca. "Tranquila. Haré lo imposible para que no se salga con la suya."
Los gritos de la chica se oyeron durante toda la noche, al recibir el alcohol en su rostro. Suni sostenía con fuerza la mano de su compañera mientras que con la otra curaba su rostro.
...
La asiática ingresó al estudio con un rostro poco agradable y medianamente degradado. Había estado toda la noche anterior cuidando de su compañera, escuchando los gritos que ella emitía cada vez que movía los músculos de su rostro.
Se había encargado de hablar con el mánager, y con el dueño de la compañía para explicar lo sucedido. Claramente no fue capaz de delatar a Hye, simplemente porque sabía que de todos modos no le creerían.
La madre de Hye resultaba ser la pareja del dueño, así que, obviamente que tenía tratos especiales.
Suni le había exigido a Anyca que permaneciera en reposo aquel día, y que ella se encargaría de cubrirla.
Los chicos comenzaron a ingresar a los camarines como habitualmente solían hacer. Seguido de ello, Yangmi y Hye se hicieron visibles. Suni la fulminó con la mirada a esta última.
Pronto le dejaría varios puntos en claro.
Suga parecía buscar disimuladamente algo en la habitación, como siempre manteniendo una expresión nula.
Tal vez la buscaba ¿A ella?
Bah, tonterías, Anyca no era el tipo de Suga. Ni en un millon de años lo sería, o por lo menos eso había declarado el primer día.
Los chicos comenzaron a turnarse para pasar por las estaciones a arreglarse el cabello, maquillarse y elegir el outfit.
Finalizarían con la sesión de fotos.
Suga se sentó con Suni, aun mirando algo desorientado a su alrededor.
"Buen día Yoongi."
"Buen día." Espetó de mala gana, respirando pesadamente debajo de su barbijo.
"¿Con qué empezamos hoy?" Preguntó la chica, refiriéndose al cabello o al maquillaje.
"¿Dónde está?" Preguntó ignorando lo que ella le había cuestionado.
"¿Disculpa?" Suni no lograba comprender.
"Anyca." Habló casi en susurro. "¿Dónde está?"
"Ella no está bien, Yoongi." Suni se limitó a decir.
El chico frunció el entrecejo. "¿Qué le sucede?"
"No puedo decirte. Ella me pidió que no lo dijera."
Suga tomó repentinamente y de manera brusca el brazo de la chica, ejerciendo algo de presión. "Dímelo Suni." Exigió endureciendo las facciones.
Suni permaneció paralizada, tal vez dudando en qué hacer al respecto.
Y del otro lado de la sala de hallaba Hye, sonriendo victoriosa al ver la cara de desconcierto de Suni y al saber que Anyca no estaba presente aquel día. Ella continuaba a peinar el cabello de Jungkook, y repetidas veces solía acariciar la nuca del chico.
Jungkook la observaba sonreír desde el espejo. Entonces fue cuando la duda lo incentivó a preguntar. "¿Qué es tan emocionante?"
Hye sacudió la cabeza, tal vez intentando borrar posibles futuros planes para seguir hundiendo a Anyca. "Hoy estoy de humor Kookie. Eso es todo." Continuó peinando.
"No me digas Kookie. Soy Jungkook." Exigió regresando la mirada a su teléfono.
"Yoongi, no puedo decirte." Suni continuaba insistiendo mientras levemente intentaba salirse de su agarre.
"No te soltaré hasta que me dig-"
El ruido de la puerta llamó la atención de todos. Yoongi amplió los ojos, al igual que Suni.
Allí estaba ella, llevando aquella ropa anticuada típica de su personalidad, el cabello algo despeinado y en su rostro, un barbijo que le cubría todo menos los ojos.
Anyca no se había rendido.
La latina ingresó a la sala haciendo una reverencia y arrugando los ojos, dando a entender que detrás de la tela de aquel barbijo, estaba sonriendo.
"¿Anyca?" Suni parecía estar en shock.
"No podía dejarte con la carga." Habló por primera vez, para luego dirigir una corta mirada a Suga. "Yo me encargo de Yoongi. Gracias." Suni asintió y fue a su estación a atender a Hoseok, que aun esperaba impaciente a ser atendido.
Suga la observó, la miró por un largo rato y en cierto modo se sentía aliviado de verla.
<<¿Por qué lleva ese barbijo?>>
La sesión de fotos finalizó en menos de lo esperado y comenzaron el horario de descanso luego de un arduo día de trabajo.
Yangmi y Suni terminaban de limpiar sus brochas. Hoseok, Jin y Namjoon comían kimchi en pequeñas bandejas, charlando y riendo sobre quién sabe qué. Jungkook, Jimin y Taehyung jugaban a las cartas. Y Hye, ella había salido temprano. Hervía en rabia, no soportó que Anyca se apareciese en la sala. Esta última estaba recorriendo la sala, observando detalladamente la partida de Jungkook desde varios ángulos. Ese chico realmente la hacía estremecerse.
Sintió la necesidad de ir por un vaso de agua. Así que rápidamente salió del camarín y caminó por el angosto pasillo que la llevaría al dispensador. No logró llegar a dicho destino por que unas manos la sujetaron de atrás, tapándole la boca y arrastrándola hasta el pequeño cuarto de baño que había en el estudio.
Sintió una respiración en su cuello, sintió un cuerpo presionar contra la parte trasera del suyo.
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Paint my Heart ⇨ J.Jk (Completa)
ФанфикBig Hit se había encargado de contratar solamente estilistas casadas para el famoso grupo de siete integrantes, BTS. Pero Anyca Leyth era la única de ellas joven, soltera y disponible para cualquier hombre. ¿Por qué contratar a una mujer así tenie...