* 𝕆𝕦𝕥𝕣𝕚𝕘𝕙𝕥 𝔻𝕖𝕔𝕖𝕡𝕥𝕚𝕠𝕟 *

~ 𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 22 ~

                                                                                     ℂ𝕦𝕝𝕡𝕒

— Fue en defensa propia — dijo, por lo que probablemente fue la décima vez en los trece minutos que ella había estado hablando con él— Fue hacia a ti, podría haberte matado.

— Había otras maneras — susurró Taehyung.— No tenía que matarlo, lo podía haber restringido, yo sé cómo,O dispararle en la pierna, o...—

— No hiciste nada mal — dijo en voz baja— Taehyung, escucha, tal vez uno o dos días fuera no serían tan malos después de todo. ¿Qué dices? —Taehyung negó con la cabeza. 

—No puedo... —

—¿Por qué no puedes?— Taehyung suspiró y apoyó la barbilla contra la palma de su mano. 

— No puedo quedarme en casa y no hacer nada. Y tampoco puedo... — permanecer aquí porque Jungkook está aquí y Jungkook es la distracción que necesito. Una distracción que no puedo tener. 

— ¿Qué? —

— Nada — Taehyung negó con la cabeza. No había forma de que le dijera esto a Anne, no le había dicho a nadie, y especialmente no a alguien que era la psiquiatra de Jungkook. ¿Cuándo todo esto se había puesto en tan mal estado? 

— Muy bien — dijo ella y se inclinó en su silla. — Entiendo, pero tómalo con calma, ¿de acuerdo? Y trata de recordarte a ti mismo que no hiciste nada malo.— Taehyung asintió. 

— Lo haré. 

— Si alguna vez necesitas hablar con alguien, ya sabes dónde voy a estar — dijo y le sonríe amablemente antes de que lo dejara solo.

***

—¿Me estás evitando? — Taehyung fingió no haber oído y siguió mirando el patio, mirando a los prisioneros fuera cuando tenían tiempo libre. Jungkook estaba sentado en un banco junto a él, mirándolo con los ojos entrecerrados. 

— No me gusta ser ignorado — susurró Jungkook y le dio una patada a Taehyung en la espinilla.

— ¡Ay, mierda! — siseó Taehyung y miró a Jungkook.— Deja de hacer eso, deja de hablarme aquí, donde todo el mundo puede ver. 

—Paranoico — dijo Jungkook suavemente— Mira, sé que estás asustado por haber matado a ese hombre o como sea, pero estoy aburrido y no has venido a verme hace una semana.—

— Sí, bueno... — Taehyung calló, mirando a Jungkook rápidamente antes de mirar a los otros de nuevo. — He estado muy ocupado.—

— Um...jum—Jungkook parecía impresionado, pero la verdad era que Jungkook tampoco había hecho contacto con él toda la semana. Ambos habían estado en el comedor al mismo tiempo, varias veces, pero en ninguna ocasión, Jungkook había volteado a verlo. Al principio, Taehyung había encontrado eso extraño, pero después había decidido que era lo mejor. La distancia era buena. — ¿Alguien te ha dicho alguna vez que eres un terrible mentiroso?—  Taehyung soltó un bufido y Jungkook negó con la cabeza.

 Ambos se quedaron en silencio, pero Taehyung podía sentir los ojos de Jungkook sobre él, como un par de rayos láser quemándole. Eso hacía que se le pusiera la piel de gallina, dándole ganas de girar y escapar. Por suerte, el receso terminó pronto y era hora de que todos los prisioneros volvieran a entrar. Jungkook se levantó del banco y se paró enfrente de Taehyung.