ᴊᴜsᴛ ᴀɴᴏᴛʜᴇʀ sᴄᴇɴᴇ | Dabi

Acto 1;

"El telón se abre dando inicio a una nueva historia con un final muy prematuro"

A la sociedad le encanta dar etiquetas a todo el mundo, no es algo extraño que alguien termine siendo un asesino o un simple empresario. Le encanta tratar de alejarnos de nuestros sueños dándonos diferentes papeles en este triste escenario, una tonta obra de este mundo que se extiende a todos lados, la presentación de una vida que se acaba. Así me sucede como a todas las personas, hasta donde yo sé, en ésta ciudad. Los papeles principales en esta obra son los de villanos y héroes, los demás somos un simple adorno, los personajes secundarios o la escenografía, como cuando en la obra en la que anhelabas participar terminas siendo un árbol de fondo. No estoy en contra de los héroes pero tampoco estoy con los villanos, solo soy una simple fotógrafa que pasea por la ciudad una vez más, buscando la foto que represente perfectamente esta gris ciudad.

Me encuentro con un parque frente mío. El viento arrastra las hojas secas en una esquina, solo quería contemplar el paisaje un poco más así que decidí tomar una foto. El viento de otoño es más frío de lo normal. A mi lado camina una persona particular, alguien quien pertenecía a los personajes principales, sólo que no sabia que papel tenía.

Continúa su camino perdiéndose entre la multitud que salía del trabajo a esa hora. Un personaje principal entre secundarios. Debería ser fácil de encontrar, no podía evitar sentir que debía seguir a esa persona pero no cedí ante mis impulsos y continúe tomando unas cuantas fotos a mi alrededor, frustrada, no sabiendo el porqué.

Me dirijo a un café, el frío se extiende por toda la ciudad junto con unas nubes grisáceas apagándola aun más, se va desvaneciendo. Por la ventana logro enfocar mi reflejo mientras soplo un poco al café en un intento de enfriarlo, pruebo un poco del pedazo del pastel que tengo en la mesa, siempre como la fresa al último disfrutando el sabor de cada pieza que voy comiendo poco a poco sabiendo que me espera un dulce sabor al final. Miro mi la hora, es tarde, es hora de que regrese a casa para repetir el día mañana pero siento que no será igual.

Llego al punto en que estoy sola en medio del camino, los pies me pesan pero no me siento cansada es como si estuvieran rogándome regresar a buscarlo pero, nuevamente, me niego.

Debo seguir con mi papel, una expectadora de la sociedad, marcando en cada fotografía los mejores momentos de la ciudad. Llegué a casa, me retiro los zapatos y camino hasta la sala para descansar un poco, no tengo ninguna mascota o persona que me espere al llegar. Fui a la cocina, abrí el refrigerador en busca de un poco de comida, nada, me preparé un sándwich junto con un vaso de agua. Cuando termino me voy a mi habitación, me acuesto en la cama pero noacosadora a, me quedo contemplando el techo y alzo mi mano intentando alcanzar el techo. No se a ido. Todavia estoy esperando a que vuelva esa persona. Me terminé durmiendo.

Otra mañana fría se asomaba por mi ventana, una leve luz del sol me despierta. Abrí las cortinas dejando entrar la poca luz que el sol emite, esta nublado.

Tomé un baño con el agua casi hirviendo, el frío no es de mis cosas preferidas, me cambié y salí de la casa, no sin antes tomar mi desayuno y mi cámara junto con mi celular y un poco de dinero.

Regresé al mismo lugar de ayer, buscaba una toma distinta del mismo paisaje. Junte mis dedos asimilando una cámara y cerré un ojo intentando enfocar una buena foto. Ahí lo veo de nuevo, alguien resalta de entre la multitud, si, es aquel personaje principal. Niego con la cabeza e intento enfocar otra cosa pero, inconscientemente, le tomé una foto.