Capítulo 22.

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Una rosa, dos rosas, tres rosas, cuatro rosas, cinco rosas, seis rosas, siete rosas, ocho rosas, nueve rosas y diez rosas.

Diez rosas contó Jungkook mentalmente a la vez que colocaba cada una en un jarrón con agua que había preparado anteriormente, aprovechando que Jimin se estaba duchando.

Soltó un suspiro, sin creerse lo que había pasado los últimos minutos, una sonrisa apareciendo en su rostro, ensanchándose a cada segundo. Estaba contento por ello, deseaba arreglar las cosas con Jimin, había sido muy duro y muy difícil estar tanto tiempo sin él, sin poder hablarle y sin poder verle.

Muchas veces había cogido él móvil para llamarlo, pero al final terminó desistiendo de la idea de llamarlo.

Ahora que las cosas parecían arregladas, al menos un poco, debía hablar con Jimin, aún había cosas que debían decirse.

Como si lo hubiese invocado, unas manos serpentearon su cuerpo, desde sus hombros hasta bajar lentamente a su cintura, quedándose en él lugar. Una suave respiración en su cuello que lo hizo temblar y un beso en esa zona fue lo que recibió antes de escuchar la voz de Jimin.

-¿Que haces?.-quiso saber, en realidad Jimin solo quería hablar con él menor, estaba viendo con sus propios ojos lo que hacía él menor.

-Nada.-dejando de lado él jarrón, ahora lleno de las rosas que Jimin le había regalado, se giró quedando frente a el.

Jimin quiso acercarse más a Jungkook, para así pegar sus labios, deseaba besar más al menor, pero su intento se vio detenido cuando él menor separó su rostro ligeramente, sin ser brusco.

-Quiero hablar contigo.-agarrando la mano de Jimin caminó hacia la pequeña sala del departamento.

Cuando se sentó, tiró de la mano de Jimin, para que se sentara a su lado, en ningún momento separando sus manos.

-Yo....-carraspenado, Jungkook se dijo a si mismo que debía hablar de una vez, para evitar futuros problemas-.Quiero decirte algo, prefiero que te enteres por mí, a que luego lo sepas de otra manera y te hagas ideas equivocadas.

Jimin asintió ante la seriedad de Jungkook, sea lo que sea lo que Jungkook tenía que decirle él debía reaccionar bien, no quería volver a una situación parecida a la vivida todo ese tiempo, por lo que inhaló suavemente, relajando su cuerpo.

-Está bien.-Jimin asintió hacia él.

-Hace como dos semanas, Yugyeom estuvo aquí, conmigo.-soltó de golpe.

-¿Que?.-nada más salió de la boca de Jimin, no podía articular otra palabra, divagaciones de todo tipo comenzaron a formarse en su cabeza.

-Si.-frunció los labios-.La última vez que nos vimos.-una mirada retadora apareció en el rostro de Jungkook, recordando la reacción de Jimin al ver la noticia del encuentro con su amigo-.Quedamos de vernos algún día que los dos estuviéramos desocupados, así que...

-Tu.-Jimin le interrumpió-.Dijiste que ese día que le viste fue una coincidencia, y que ni siquiera tuviste tiempo de hablar con él.-su ceño se frunció-.¿Como fue que hablaste con él sobre veros algún día?.

La boca de Jungkook se abrió por él asombro ante las palabras del mayor, Jimin le estaba diciendo, en pocas palabras, que era un mentiroso.

-¿Que intentas decir con eso?.-se levantó del sillón de forma abrupta, mirando con enfado al mayor-.No aguantaré esto una vez más.

Jimin se levantó de golpe del sillón, reparando en sus palabras y en él error que había cometido. De forma rápida sus manos agarraron las del menor y lo miró con intensidad.

Jealous.  ∆Jikook∆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora