Imperfect💙

Prólogo

Necesito el dinero, lo necesito de verdad para salir de aquí.

No me queda más remedio que hacerlo. Me levanto como siempre, y me dirijo hacia el Halcón,  y me apuesto todo lo que quieras a que está allí. Y la veo, la veo en una esquina llorando con una botella de ron barata y me acerco hacia ella.

-Mama vámonos- le suspiro en el oído para que me oiga.

Ella sigue llorando y despotricando cosas sobre Charlie y lo que le ha hecho. Resulta que Charlie no es un santo, peeo mantiene a mi madre. Me da vergüenza admitirlo pero la voy a dejar en unos días aquí sola, quisiera llevarla conmigo pero ella ya me dijo que no quería ir, que Charlie se preocuparía. Como si Charlie se preocuparse de alguien más que de el mismo, sólo sirve para meterse en problemas. Como por ejemplo está mañana; lo han puesto en comisaría por posesión de drogas.

Charlie no es mi padre pero es el novio de mi madre y la mantiene a ella y el departamento. Pero espero que se pudra en la cárcel, aunque mi madre tiene la loca idea de que conseguirá sacarlo de comisaría.

No soy una badgirl pero tampoco soy una chica fresita. Soy simplemente yo. Sólo sé que quiero irme de aquí y empezar mi nueva vida, ser simplemente una estudiante de enfermería. Me lo he ganado a pulso y he puesto todo mi empeño en esa maldita beca para irme de esta maldita vida en la que estoy metida.

-Crystal, sabes una cosa? Te quiero... pero por tu culpa él  se fue! Se fue! Y te odio por eso- Dice mi madre sacándome de mis pensamientos. O más bien lo balbucea borracha.

No le hago mucho caso a lo que dice, así que la arrastro de camino a la salida y digo adiós a Bonnie, la dueña de el Halcón . En la calle todo el mundo me mira con pena, ya me he acostumbrado a esas miradas, ya me conocen y yo los conozco, sólo quieren espectáculo y eso es lo que les da mi madre siempre en este paseo de la vergüenza. No nos ayudan, sólo nos miran con pena y eso me da rabia, que nos miren como si fuésemos un maldito circo andante.