Sarcasm. ~Richie Tozier y tú

Capitulo 21

Miércoles apenas. PUTA MADRE.
Ando de buenas, quizá por los chocolates diarios que ingiero lentamente.
Los chocolates son mi droga cabrones fin del comunicado.

Me bañe y arregle. Me puse una suéter de manga larga blanca, tenía unas franjas rojas en los puños y en el cuello. Esta bien bonis igual que yo.
Puta madre los chocolates me afectan.
Me puse unos jeans rotos pero con parches abajo. No se me veía la piel como siempre.
A sonado un poco mal.
Me puse mis converse blancos y combinaba mas que un chocolate blanco y fresas.

NO ESTÁS EN TUS DÍAS ____ PARA DE PENSAR EN CHOCOLATES.

Salí con mi patineta a mi escuela bien feliz de la vida. Me crucé por una calle y me encontré un pequeño supermercado.

Chocolates.

Entré y con $20 dólares compré 5 chocolates. Cada uno costó $4... Matemáticas hijo xd

Los metí en mi mochila en la bolsa de toallas... para que nadie se le ocurra sacarlo... son míos.

Llegue y abrí mi casillero, puse mi patineta y mi mochila adentro. Toca matemáticas, hora libre y perfecta para empezar con un chocolate.
Saque uno discretamente para que nadie viera mis toallas, menos Richie.

- ¡____!- gritó Richie haciéndome brincar y cerrar mi casillero. - ¿Estas metiendo a alguien muerto?
- ¿Que mierda?
- Te has puesto nerviosa. ¡Estás en tus días!
- No tonto.
- Entonces porque siempre te atascas de chocolate.
- Porque los amo.
- Quisiera ser un chocolate.
- No seas pendejo.
- Quisiera que me amaras como los chocolates beibi.
- Te amo más que a los chocolates.

Se sonrojó.

Bebesito bonito cochita bonita.

- Te has sonrojado.
- Claro que no. - dijo abriendo su casillero.
- No eres nada bueno ocultando cosas.
- Puta madre jesucristo redentor.

Muri xd

Me fui a matemáticas con un chocolate. Debería de dejar de hablar de esto ya.

Llegue al salón y todos estaban recargados en los bancos.

- ¡Que pedo! Alguien se murió.

Erick levantó la cabeza. Me hizo señas para que fuera.

- ¿Que mierdas sucede?- susurré.
- No tengo ni idea... están todos raros y me han dicho que me recueste también.
- Mierda... esto da mal rollo.

Los mire.

- ¿Porque no hablamos como antes?
- Ella No quiere...- dijo Michael señalando a una niña.
- ¿Por qué? Si es que no te gusta podemos hacer otra cosa.

Me miro... bien feo.
Hay cabrona que te hice.

Se levanto y preparo su puño. Me acerqué y la abracé tratando de que no me pegara.

- Tranquila, si quieres hacer algo mejor dímelo.

Se retorcía. Erick se levantó, me jalo hacia atrás y se interpuso entre las dos.

- ¿Acaso te ha hecho algo?
- Si. Me ha roto el corazón. - respondió.
- ¿Yo? ¿A ti? ¿Te gusto o que mierda?
- Me gusta Erick, y tú me lo quitaste.

Me reí.
Quite a Erick.

- Primero, el es uno de mis mejores amigos. Dos, el no me gusta. Tres, yo que puta madre iba a saber que este cabron te gustaba.
- Pues date cuenta en cómo lo miras y como le hablas y luego me dices que no es tu mejor amigo.
- Mirarlo como pinché niña loca. A no te creas pero no se a que mierda te refieres.
- Siempre que hablas con el le miras a los ojos.
- Y que estoy haciendo ahorita contigo.