¿Coquetear?

Parte Única

Algo tenía la mamá de Taemin como para querer comer pizza al menos una vez a la semana, cosa que causaba mucha inconformidad en su hermano y padre ya que en ambos se notaban cada vez más sus mejillas regordetas.

Por su parte, a Tae ya no le importaba, se había metido al GYM hace poco más de un mes, y ya podía notar el cambio: su pancita de bebé casi desaparecía por completo.

Veía tele recostado en el sillón más grande de la sala, con la cabeza sobre las piernas de su mamá, mientras que ella platicaba con alguna de sus amigas por teléfono y acariciaba su cabello de forma distraída, era agradable permanecer en la misma habitación con ella, aunque no estuvieran haciendo lo mismo.

Hace poco más de 20 minutos habían llamado a la pizzería, así que sólo estaban matando el tiempo, ya que serían solo ellos dos en la cena de ese día.

Su hermano había llamado antes para pedir permiso para ir a una fiesta, y su padre seguía en el trabajo. Taemin tenía la sospecha de que ambos se estaban escapando del "sábado de pizza"

Sonó el timbre, y su mamá le pidió que fuera a abrir en lo que se despedía de su amiga e iba por el dinero para pagarle al repartidor.

Con el móvil en la mano —ya que seguía esperando a que Jinki le respondiera su último mensaje—, abrió la puerta, sin molestarse en prender la luz, encontrándose con el mismo chico de la última vez.

— Hola —le sonrió para ser amable.

— Buenas tardes, ¿Hawaiana con extra queso? —le preguntó más por costumbre que por otra cosa.

— Sí, Minho. Gracias, ya viene mi ma' con el dinero —tomó la caja que el alto le tendía, sin poder ocultar su sonrisa de satisfacción al momento en el que le llegó el delicioso aroma.

— ¿Desde cuándo comer pizza adelgaza? ¿Estamos usando un queso especial para ti? —habló curioso, llamando la atención de Taemin que lo volvió a ver.

— ¿Cómo dices?

— Te ves más delgado que la última vez que te vi.

Taemin quiso responder algo, pero su mamá salió con el dinero.

— Lamento la demora, cariño. Aquí está lo de la pizza y tú propina, gracias.

Minho ya no dijo nada al respecto, no se esperaba que la señora saldría de la nada, se despidió de ambos y fue hacia su moto para seguir con su trabajo.

La señora Lee cerró la puerta, sonriéndole a su hijo cómplice.

— Ya te vi eh, el repartidor te estaba coqueteando.

— ¿En qué momento pasó eso? —la miró extrañado.

— Te hagas el inocente, si lo escuché todo, pero salí antes de que le dijeras que ya tenías novio y de que le rompieras el corazón —dramatizó un poco antes de soltarse a reír.

— Mamá~ ¿Cómo se te pudo ocurrir toda esa historia? —hizo un puchero, la señora Lee ya no le prestó atención, lo que significaba que no escucharía sus palabras y las tomaría como excusas, lo dejó en la entrada de la casa, ella fue a la cocina para poder cenar.

— Además, si me estuvieran coqueteando, me daría cuenta —dijo para sí mismo.

Terminó su berrinche en el momento en el que su teléfono sonó, era Jinki.

...

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Algo cortito y ligero ^^

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