15 de Marzo

Días

Ha pasado una semana desde que ya no está, lo sigo extrañando, aún lloro, pero ya puedo dormir.

EL DÍA

- Creo que debemos tomarnos un tiempo para pensar bien que es lo que queremos cada uno - me dijo muy fastidiado

- Yo no tengo nada que pensar, te dije siempre como me sentía y no hiciste nada para hacer que las cosas cambien, quiero estar bien, necesito estar bien - le dije

-Entonces te dejo tranquila

La frustración del momento fue la que me hizo hablar, yo esperaba que me diga que lo lamenta y que pondrá de su parte, pero no fue así.

Mi orgullo y el consejo de una amiga en dejar las cosas así, que era lo mejor, decidieron no seguir hablándole.

Llore un poco en la noche, pero decidí dormir.

DÍA 2

Esperaba que me hablara, pero no lo hacía, deje de ver cosas graciosas ( yo era experta en eso ), pero seguía sintiendo que íbamos a volver.

Volví a llorar antes de dormir, extrañaba sus buenas noches.

DÍA 3

Lo conocía tan bien, que ya empezaba a sentir que todo se había acabado y no me iba a hablar.

Soy o solía ser muy orgullosa, pero lo amaba tanto que la verdad lo único que quería era estar bien con él.

- Hola, tengo unas cosas allá, puedo pasar a recogerlas más tarde? - pregunté
En mis planes estaba entrar a su casa y decirle que si podíamos hablar

- Hola, si, normal, pasa a las 8, yo te espero.

Juro que ese día las horas pasaron tan lentas, que mi barriga estaba sintiendo las ansias demasiado fuerte.

Me peine, me cambie de ropa, me puse un poco de perfume, me volví a peinar, me puse aretes, ya no aguantaba más que no sean las 8.

Llegaron las 8, y yo estaba más que lista, y preferí enviarle un mensaje antes de decirle que ya estaba afuera.

-Ya estoy por salir- le envíe

Pasaron 3,5, 10 minutos, y no respondía. Sentí que le daba tan igual verme, que se había olvidado.

8:20

-¿Donde estás?
¿Donde estas??!?!

Supuse que estaba en su puerta esperando, así que sin más salí apresurada.

Estando afuera le envíe un mensaje

-Estoy aquí, me abres?- mientras escribía esto, acababa de ver sus 10 mensajes diciendo que espere, la cara se me iba a caer de vergüenza. - Disculpa, añadí, no vi todos esos mensajes

-Te dije que esperes- me dijo

-Lo siento - conteste - solo vi el donde estas y supuse que estarías afuera ya

-Espérame, estoy en clase aún - sabía que llevaba clases virtuales, pero no sabía de sus horarios, además era mala recordando esas cosas

Espere 5 minutos, los más largos, cuando por fin escuche pasos en su escalera.

- Te dije que esperaras - soltó

- Lo siento, no lo leí, porque ya estaba de salida

- Bueno, toma - me dio un poco de ropa mía y accesorios que había dejado ahí, a lo largo de esos casi dos años - falta una bolsa más, puedes volver en 15 minutos?

Dije que si, y me fui.

Regrese a casa más confundida, por que sentí indiferencia y claramente sentí que ya no era el mismo conmigo, y entonces me llegó un mensaje diciendo que vaya.