Sus labios se mueven junto con los míos y sólo soy capaz de seguirle el rollo y sujetarle la nuca para profundizar...Rango rango!!
¿Qué estoy haciendo?
Me separo bruscamente de él colocando mis manos en su pecho bien formado alejándolo de mí.
-Lo siento- digo, Aron me mira con el ceño bien fruncido,- por haberte dejado propasarte conmigo, pero me temo no volverá a pasar.
Se ríe de forma ronca sacudiendo la cabeza.
-Dime, ¿Realmente eres así o solo es tu mecanismo de defensa quien te hace actuar de ese modo?, cómo cuando no hace poco quisiste dejarme ciego.
-No tengo la culpa de que en momentos quieras hacerte la diva con la gente. Mírale el lado bueno, de las experiencias se aprende- hablo mostrándome de por sí más segura que la propia palabra que sale de mi boca.
Abre su boca en un amago de decir algo, cuando la puerta es abierta en una velocidad que me deja no poder procesar bien la escena ante mis ojos.
Dos hombres se adentran en el cuarto de baño besándose, uno manteniendo su mano entre los panties del otro.
Me quedo estática como una piedra sin saber cómo reaccionar al instante.Veo como la mano del sujeto está por sacar el miembro de su amante o quién diablos sea a la luz, todo eso sin percatarse de nuestra presencia, cuando Aron de inmediato con su mano me tapa la vista, a lo que lanzo un chillido por la impresión de no haberme dado cuenta de en qué momento se acercó a mí.
-No se preocupen, ustedes sigan- dice mi salvador de una posible trauma.
Soy consciente de que mi chillido les acababa de cortar el rollo, pero es que vamos, no estaba todavía asimilando nada, y no es que esté en contra de las relaciones hetero u homo como mierda se llamen, pero vamos, Chicas háganme justicia, ¿ustedes que harían en una situación cómo está?.
Siento el brazo de Aron cerciorarse en mi cintura y poco a poco comienza a guiarme hasta la salida.
De nuevo la música alarmante y eléctrica vuelve hacer eco en mis oídos, siento las manos de Aron fuera de mí y me giro para encararlo.
-De no ser por tu culpa no habría pasado por eso- siento la palpable furia en mí, él de no haberse metido conmigo no hubiera recibido un charco de wiskey en la cara, y yo no le hubiese seguido tampoco.
Aron me mira de nuevo con cara confusa, y aunque realmente se vea atractivo con ella, ¿Es que no sabe hacer otra cosa a más que mirarme como una completa demente?, Porque claro, esa es mi definición ante las caras confusas.
Giro sobre mis talones y me encamino con todo el cúmulo de emociones hacia donde anteriormente estaba hasta que una mano detiene mis movimientos.
Espero encontrarme con Aron, pero se trata de mi amiga Lena.
-¿Donde te metiste?, Se supone te nos ibas a unir..- habla con atisbo de decepción. Vamos, ni que me haya ido a Alaska sin ella.
-Estuve por aquí observando, es más, si estabas con Sebastián, no quería arruinar vuestro momento.
-Sebastián me dejó hace rato cuando se fue al baño, no sé qué demonios era lo que quería decirle a su amigo y claro que el ruido no lo permitía.- dijo lo último haciendo movimientos raros con los brazos refiriéndose a la música, que entonces sonaba Faded, de Alan Walker.
-¿Estas diciendo que Sebastián se fue hace rato con un amigo suyo a los servicios?- espero no sea lo que pienso.
-Si- respondió sin duda alguna.
¡No puede ser!, el desgraciado es un puto bisexual, ¿Cómo no pude darme cuenta antes?, En el momento que entraban los susodichos, el atuendo de uno se me hizo conocido pero lo pasé por visto.
Tomé a Lena del brazo, -¿Sabes que?,mejor larguémonos. - quise comenzar a andar con ella, pero me detuvo el paso.
-¡Eeh!!, frena un poco, al menos esperemos a Sebastián.
Mi frustración estaba llegando a un nivel de 100°, y estaba más que segura no iba a poder controlarme.
Están acostumbrados a leer, ¡Cuántas emociones en tan poco tiempo!, Pero yo les enseñare otra, ¡Cuánta ganas de querer gritar en tan poco tiempo!, Y sin más lanzo un grito desgarrador que asusta en primer lugar Lena, y luego a los que están a nuestro alrededor.
-Tranquila,- dice Lena mientras me toma el brazo,- respira y suspira,- me dice en cuanto cesó mi “libra de frustración”.
No soy capaz de aguantarlo más así que lo suelto de golpe.
-Sebastián es un puto bisexual.
-¿QUE?-Es lo primero que dice.- Que mierdas estás hablando.
La tomo del brazo y con pasos seguros me dirijo con ella hacía la puerta del servicio de chicos, esperando no cruzarme con el idiota de mi nuevo compañero de pupitre.
Una vez frente a la puerta, señaló la misma y con gestos la hago ademán de que la abra, claro, doy pasos hacia atrás porque no quiero ver lo que demonios pasa dentro.
Lena me ve retadora y sin pensarlo más, abro por mi cuenta la puerta, vacío, me lo imaginaba, Lena entra conmigo por dentro y se cruza de brazos, viéndome con esa típica mirada de que iba a esperar de tí.
Pero para mi suerte unos gemidos de parte de unos cubículos llama nuestra atención, ¿Hace falta decir de quien era la voz del gemido?, y entonces cuando giro a ver a Lena con una mirada de Decías?.
Mi amiga que ahora mantiene la boca bastante abierta, se acerca rabiosa a la puerta que dirige a ese cubículo, y con una patada, ¿De donde saca tanta fuerza?, abre la misma, mientras yo la miro asombrada.
Deciros que pasó después, seguro ya lo sabréis, teniendo en cuenta que Lena es de esas que saben dar, está claro que en años Sebastián nunca tendrá que olvidar el momento que mi gran amiga le hizo pasar.
***
Llegar a casa es un alivio para mí, pero no para Lena que se la pasa llorando,que tengo que invitarla pasar la noche conmigo e invitarla a por un chocolate caliente.
-Te juro pensaba llegar a fondo con él, estaba segura que era el ideal- dijo mientras sorbaba su nariz.
-Siempre al final de las relaciones dices esto, - ruedo los ojos,- Lena, creo que debes sentar la cabeza, date un momento para reflexionar, y no incluyas a ningún otro tipo en el proceso, que luego te desmoronas y soy yo quien tiene que lidiar con tu moco y todo eso.
Coge la almohada de mi cabecera y me lo lanza.
-Cayate idiota.- me dice.- Aunque tienes razón creo que es momento de hacerme también lesbiana.
Hay un minuto de silencio, y las dos rompemos en carcajadas.
-¿Que sería de mí sin tí?- dice cuando nos hemos composturado- Pueda que seas tan amargada, y te quejes de mi despertador de todas las mañanas, pero eres una buena amiga y eso es lo que cuenta,.- veo como sus ojos se nublan- Gracias por estar ahí Taylor.
Con eso, nos damos un efusivo abrazo, y pasamos la noche juntas viendo Crepúsculo, y perdiéndonos en nuestras penas.
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E allí otro capítulo, espero os guste como a mí al escribirlo..,👑👑, espero igualmente voten xfaa.
Xao babeees.