22/4/2018
Al parecer me había quedado dormida, y Tom me había acompañado en el sofá.Me había despertado por unos golpeteos, provenientes del pasillo fuera de mi departamento, y me dirji afuera para ver que sucedía.
Había un gato raspando una puerta, y no era cualquier gato, era Ringo.
No se que hacia allí, pero salí de mi departamento y le abrí la puerta para que pasara.
Allí no había nadie, pero la curiosidad es muy fuerte.
Al entrar Ringo maullaba como loco, y para no despertar a los demás, lo saqué de allí y lo llevé a mi departamento.
En donde había entrado antes, estaba oscuro, y no había luz. Por lo cual entré yo con una linterna.
No habia nada, por lo cual me extrañe y volví a mi departamento.
Ringo estaba junto a Tom, dormidos plenamente en el sofá.
Yo me hice un café y me quedé mirando por la ventana.
Pensaba en el porqué los chicos eran como eran, y porque me habían aceptado.Estaba quedándome dormida por culpa de la lluvia; pero Tom me había puesto a Ringo en la cabeza.
Me había asustado, pero luego me reí junto con Tom.
El era agradable, aunque a veces era algo gruñón.
Luego de unos dias, estaba en la casa de los chicos cocinando, y me corté la llama del dedo con un cuchillo.
Los chicos se quedaron mirando la sangre con una mirada perdida, todos estaban imnotisados por la sangre, y yo lo que hice fue vendérmelo con una servilleta para que salieran de su trance.
Ellos se discilparon y el día siguió normal, pero de vez en cuando alguno de ellos miraba la sangre del papel manchado.
Y eso me preocupaba un poco.
Decidí hacerlo otra vez, peto esta vez mas profundo.
Ellos se hacercaban a paso lento, y quería saber que hacían.
El primero en llegar fue Edd.
El agarró mi mano (que tenia una cortada profunda en la palma), y lamió la sangre, se sintió raro pero placentero a la vez.Los demás se lo quedaron mirando, y yo lo había apartado suavemente para ponerme una servilleta, hacer presión y no morir desangrada.