Yo seguía empeñada en hacer que Ariana llamara a Ben papá pero ella no cedía.
"¿Qué caso tiene que le llame así? La niña sabe que no lo es" mi conciencia otra vez.
De todos modos ¿cómo podía obligar a Ariana que llamara 'Papá' a Ben, si yo no estaba segura si pasaríamos toda la vida juntos?
Melinda me había dejado claro que Tom y ella no tenían nada que ver, que sólo había sido una casualidad que se lo haya encontrado en aquella cafetería. Y yo por un lado me quedé tranquila pero por otro... Me reprendía al pensar que tal vez lo que había sentido eran celos. ¿Celos?
Y luego estaba Tom, no lo había vuelto a ver desde aquel día, pero Ariana me lo recordaba bastante. A veces tenía los mismos gestos, los mismos modales y podría jurar que su risa se parecía bastante.
De vez en cuando me sorprendía pensando en él, y me regañaba yo sola al permitirme hacer tal cosa.
Porque ahora estaba con Ben, yo había tomado mi decisión y el que estaba a mi lado era Ben y no Tom. Y yo disfrutaba estar con Ben por que Tom salía de mi mente por un momento... y Tom no estaba aquí. Y Ben... Ben era magnífico.
Una noche mientras teníamos relaciones, él tenía su cara enterrada en mi entrepierna y me permití cerrar los ojos. Sentí como iba subiendo por mi vientre, mi estómago, se detuvo un momento en mi ombligo y continuo. Cuando llegó a mis pechos se entretuvo más, abrí los ojos para tomarle la cara y besarlo pero no era Ben... Era la cara de Tom la que sostenía en mis manos.
-¡No!- grité aterrada empujándolo y apartándome de él.
-¿Amor que pasa?- me preguntó preocupado.
-No, no... Nada Ben, es sólo que me acordé que estoy en mis días fértiles.- mentí horriblemente y me puse de pie con el corazón saliendo de mi pecho.
-Alex, tenemos condón.- se puso de pie todavía listo y comenzó a acariciar mis hombros y a besar mi cuello. Realmente yo quería hacerlo pero tenía miedo de volver a ver a Tom. Respire varias veces y me volví para besarlo.
Retomamos dónde nos habíamos quedado pero esta vez no le quitaba los ojos de encima a Ben no quería volver a "ver" Tom sobre mi.
Cuando entró en mi me retorcí de placer. Le tomé la nuca fuertemente mientras comenzaba a besarlo. Con un movimiento de cadera conseguí quedar sobre él y empecé a controlar la velocidad.
-Me encantas, Alex... Te amo.- decía al borde del orgasmo mientras tomaba mis caderas y empezaba a guiarme.
-Te amo, ¡Oh...Tom!- solté cuando ambos llegamos.
Me tapé la boca con ambas manos aterrada.
"¡Oh, no! Eres una idiota" me dije.
"Alguien está en problemas" anunció mi conciencia mientras se desternillaba de risa.
-¿Tom?- preguntó Benedict aportándome de él enojado.
-Ben... Lo siento tanto.- dije sollozando. Se puso de pie y se dirigió al baño cerrando de un portazo.
Me senté sobre la cama recargando mi cabeza en las rodillas y comencé a llorar.
"¿Que pasa contigo?" Me regañaba yo sola. "¿Estás loca?... ¿Tom?"
Salió del baño en deportivos y una chamarra.
-Cuando vuelva no quiero que tú estés aquí. Mel puede llevarse a Ariana una vez que haya vuelto. Pero a ti... No quiero volverte a ver.- dijo con desprecio y salió de la habitación. Aguanté la respiración cerrando los ojos hasta que escuché la puerta de entrada cerrarse y rompí a llorar sobre la cama.
Eran cerca de las tres de la mañana. Con lágrimas en los ojos me puse de pie y comencé a preparar mi equipaje.
Desperté a Mel y le conté lo ocurrido omitiendo claro el motivo real de enojo.
-Querrá despedirse de ella supongo, por favor cuídala.-le pedí mientras salía de la casa de Benedict.
Cuando llegué a mi antiguo departamento todo se sentía tan lejano.
Me hacía sentir en una falsa comodidad llena de sensaciones extrañas que me oprimían el corazón.
Me dirigí al sofá y me senté recogiendo las piernas y abrazándome el cuerpo. Me sumí en un llanto incontrolable regañandome por lo estúpida que había sido, hasta que me quedé dormida.
Cerca del medio día me desperté de golpe como si hubieran gritado en mi oído. Me dirigí a la cocina a preparar el almuerzo pero las alacenas estaban vacías, hacía mucho tiempo que no estaba en ese departamento.
Tomé mi móvil y marqué el número de Mel pero me daba tono ocupado.
Me fui hasta mi habitación y vi que todo estaba igual, nada había cambiado excepto yo.
"¿Realmente dijiste "Tom"? ¿Porque lo hiciste?" Preguntó mi conciencia.
-Ni yo misma se.- respondí en voz alta, sentía que me estaba volviendo loca al empezar a hablar conmigo misma.
"¿Aún lo amas?"
Solté un sonoro suspiro por toda respuesta. En ese momento escuché que tocaban la puerta y me dirigí corriendo hacia ella.
Eran Mel y Ariana.
-Buenas tardes,- saludó Mel tomando la mano de Ariana y en la otra unas bolsas con comida.
-Hola mami.-me abrazó las piernas a modo de saludo.
-Hola princesa, ¿porque tardaron tanto?
-Benny nos invitó a desayunar, dice que se va a ir muy lejos.- respondió un poco triste.
Mel me lanzó una mirada preocupada y yo sentí un nudo en el estómago.
-Seguramente tiene muchas cosas que hacer, cielo. Pronto volverá.- dije acariciándole su cabecita tristemente.
- ¿Qué es eso?- le pregunté a Mel una vez que llegamos a la cocina y puso las bolsas en la encimera.
-Comida. Ben sabía que no teníamos nada aquí y te envió un poco de comida.
"Esta mujer no sabe que eso no te ayuda en nada" mi conciencia apareciendo oportunamente.
-Mel por favor, no...
-Es la verdad. -se llevó a Ari a la sala y le dio sus cuadernos para colorear. Volvió a la cocina conmigo.
-Bien, escucha. Me pidió que te dijera que entiende perfectamente lo que sucedió. Que le gustaría hablar contigo ya que se calmen los dos... Ahora yo te pregunto ¿Qué pasó?- me tomó de los hombros y clavó sus enormes ojos azules en los míos.
Le conté lo que había sucedido sin entrar mucho en los detalles.
-Que intensa te viste.- soltó con una sonrisa pícara.-No tienes perdón ni de Dios.
Guardé silencio pero su comentario me dio un poco de gracia. -¿Qué más te dijo?
-Nada más. Que espera poder platicar contigo sobre eso y seguir frecuentando a Ari. Realmente lloró cuando se despidió.
-¿Estas bromeando?
-Bueno no, pero si se hubiera quedado más tiempo si terminaba llorando, ¿eh? ¿Tú cómo estás?
Me encogí de hombros restándole importancia.
-Realmente por ahora no quiero saber cómo estoy.
Mel se acercó hasta mí y me abrazó fuerte.
ESTÁS LEYENDO
No happy endings for me? (Tom Hiddleston/ Benedict Cumberbatch Fan Fic)
FanfictionReportera POV -¿Y ahora? No estas con ninguno de los dos, ¿existe alguien más?- pregunto ansiosa de saber. -Sólo hay uno.- dice mirándome con sus enormes y hermosos ojos marrones.- Y lo amo de verdad con todo el corazón.-En ese momento extiende los...