A lo largo de la vida, se entiende que no todo es para siempre. Hay cosas que duran mucho tiempo, otras que no duran nada, y otras que simplemente llegan y se van al mismo instante sólo para darnos a entender que lo que tenemos y lo que no tenemos se tiene que agradecer porque tarde o temprano ya no estará ahí con nosotros.
En la vida te das cuenta de que caes, y la vida te pone dos opciones;
Rendirse, o levantarse.
No importa la cantidad de veces que caigas, lo importante es que te vuelvas a levantar.
Es fácil decirlo, pero cuando lo estás atravesando es mucho más difícil.
La vida puede dar muchas vueltas, ya sean para bien o para mal. Las personas no siempre quieren lo mejor para ti, pero aparentan bondad para obtener beneficios. Llegan los amores, aquellos que te enseñan, pero no se quedan, solo vienen para enseñarte a ser más fuerte, y en ocasiones a no confiar en cualquiera que te ofrece amor sincero.
Quedate... Vete.
No te vayas... Adiós.
Cosas como esas se aprenden a lo largo de un tiempo. Pero hay que saber, que nadie nace con ese conocimiento, por eso duele tanto la primera vez que nos rompen el corazón, la primera pelea con nuestros padres, o reprobar una materia; porque nadie nace preparado para ello.
Es impresionante como una persona se puede llegar a destruir, sólo por construir a alguien más.
Pero, ¿Estarías dispuesto a destruirte, sólo por salvar a alguien más?
Una historia original de xXSeriuslycoldXx.
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Luz de luna. ©
Teen FictionEvalessa era una luna, que necesitaba de alguien para volver a brillar. Ella había aprendido a brillar por sí sola, pero tras la separación de sus padres, su flamante luz se fue apagando poco a poco hasta quedar sin brillo. Entonces llegara él, Maso...
