Give You What You Like (Truten)

ME GUSTAS

Narrador Trunks:

No sabía lo que me pasaba, no entendía en que momento había dejado de ser yo, aunque realmente sentía que ahora me conocía más que nunca. No fue fácil aceptarlo, ni siquiera quería pensarlo pero al tratar de olvidar sólo podía recordar ¿acaso es fácil olvidar esa sonrisa que me hace sentirme vivo u esos ojos en los que me pierdo cada vez que los miro? No, no lo es. Y no quiero, no quiero vivir sin ellos pues me mantienen vivo, aunque es difícil vivir sabiendo que nunca serán míos. Tenerlo tan cerca pero no poderlo tocar como quisiera, mirar sus labios pero no poder besarlos, admirar su belleza pero no poderle gritar lo hermoso que es. Me hace sentir preso, preso de mis propios sentimientos pero es como el trullo que hace suyo a su rehén pues me siento a salvo tras los barrotes de mis sentimientos porque me da miedo decirle algo. Esto es lo que pasa cuando te enamoras de tu mejor amigos, es lo que ocurre cuando sobrepasas la línea de la amistad y yo claramente me había pasado. Hasta tal punto de soñar despierto con tener a mi amigo entre mis brazos mientras nos jurábamos un mundo eterno ¿Qué es lo malo de soñar? Saber que nada es así en la realidad. Me levanté de la cama y me dispuse a salir a la calle ya que en media hora había quedado con él, con Goten. Siempre quedábamos para pasar la tarde junto, estaba bien pues nunca era más feliz cuando estaba a su lado, aunque después me dejara un vacío en en el corazón y un mal sabor de boca. A veces creo que Goten siente lo mismo por mí, por esas miradas que me lanza y algunas indirectas que me manda pero después solo pienso que soy un gran soñador "¡Goten no es gay!" me repito cada día pero después añado "Aunque él nunca lo ha negado" Y podría serlo, es decir ¿y por qué no? Yo lo soy, pero nadie lo sabe porque nunca lo he dicho, no tengo la necesidad de decirlo y tampoco me siento preparado. De todas formas no es algo que me defina, no voy a presentarme diciendo:

—Hola, me llamo Trunks tengo 15 años y soy gay ¿Qué les importa a ellos mi sexualidad? Por eso mantengo la esperanza de que Goten mantenga el mismo secreto que yo. Llegué a un pequeño parque y allí se encontraba él en ese banco mirando su móvil. Me acerqué a él con una pequeña sonrisa en los labios y cuando se percató de que estaba enfrente de él me devolvió el gesto.

—Hey Trunks ¿qué tal?— me senté a su lado mientras le contestaba con escueto bien. Goten comenzó a hablarme de un nuevo videojuego que había salido a la venta y que le encantaría tenerlo, sabía porque decía esto. Pronto seria su cumpleaños y quería dejarme claro cuales eran sus mayores deseos en estos momentos. Básicamente una directa indirecta de que se lo comprara. No me interesaba el videojuego, me daba igual la historia de este. En estos momentos solo podia sentir su voz más lejos mientras yo me imagianaba callandolo con un beso, después este me seguiría y entonces admitiría que me amaba ¿Por qué no pueden pasar esas cosas en la vida real?

—...Total que tiene una gran historia ¿a que sí?

— asentí volviendo a la realidad.—Vale Goten, te compraré ese juego.

—Siii— Su rostro infantil se iluminó y en un instante sus cortos brazos rodeaban mi cuello y me pegaba a él, un sonrojo llegó a mí. Me gustaban sus abrazos.—Te quiero Trunks, eres el mejor.

—Sólo me quieres porque te voy a comprar el juego.—dije cruzándome de brazos y haciéndome el molesto.

—Claro que no, te quiero porque eres mi mejor amigo— me volvió apretar entre sus brazos mientras en mi barriga revoloteaban miles de mariposas. Seguimos charlando durante horas yendo de un lugar a otro, a Goten y a mí nos gustaba vivir miles de aventuras y pasarlo a lo grande. Aunque yo llevaba toda esa tarde en otro lugar ya que había estado pensando en si hacerle saber a Goten de mis sentimientos por él o no. Lo peor que podría pasar es que me dijera que no ¿no? ¡No! Podía dejar de ser mi amigo, pensar que estoy mal de la cabeza, burlarse de mí mientras me mira con asco y difundir que me van los tíos ¿¡Y si pasa todo eso!? Aunque por otra parte podría sonrojarse, mientras agacha su mirada y tímidamente decirme que había estado esperando por años que le dijera esto y entonces empezáramos una relación en secreto. Lo segundo era demasiado bueno para que pasara.

Ya era de noche, nos íbamos a ir, el momento de la despedida llegaba.

—Hey Trunks ¿estás bien? Te noto algo ido.

—Yo...quiero decirte una cosa, Goten. Realmente no sé como te lo vas a tomar.

—Ya me has prometido que me ibas a comprar el juego ¡No puedes echarte a atrás! —habló preocupado pero yo seguia igual de nervioso.

—No es eso...yo...no sé como decirlo...¡Ahgr!— en un intento de desesperó uní nuestros labios, sólo fue un roce de labios pues este se había quedado paralizado.—Me gustas Goten, me gustas mucho.

Entonces este me pegó un puñetazo en la mejilla y salió corriendo. No entendía que había pasado, con un simple no bastaba. La había cagado, no debía de haber dicho nada. No pudo controlar sus lágrimas que cayeron como caudales al recordar los ojos llenos de furia que lo habían golpeado ¿Y si Goten ya no quería saber nada más de él? Decidí seguirlo para poder tener alguna explicación de lo que pasaba

—Goten que te pasa—dije agarrando mi mejilla me había dolido aquel golpe que Goten me había metido

—Trunks,no puedo creer que seas tan marica—esas palabras le dolieron a Trunks—que creías que iba a decir "Trunks,yo también desde hace años siento esto por ti"—dijo en torno de burla mientras Trunks estaba llorando no podía creer lo que le estaba diciendo

—Goten,por favor no sigas

—Sabes que mejor me largo no vaya a ser que se me pegue lo gay—antes de irse le golpeó en su estómago dejándolo llorando a Trunks

Al llegar a su casa Goten se encerró en su cuarto y empezó a llorar

—Por que le dije eso— el azabache estaba llorando