SHINIGAMI

Prologo

El sueño

 

"Alguna vez te has puesto a pensar que Dios permitió cosas terribles para que pudieras existir, acaso no piensas en eso, no reaccionas, entiende que tu existencia no es favorable para nuestro mundo, tu eres el desequilibrio entre ambos mundos…"

Mi cabeza no puede olvidar  aquellas palabras que con mucho rencor me dijo esa persona me sentía algo monstruoso, pensé muchas  veces en por qué Dios permitió mi existencia, pero en realidad no encuentro respuesta, ¿Por qué? No lose pero desde que conocí la verdad solo he tenido que huir con las personas que debo proteger.

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 “estoy huyendo de nuevo, una vez más por el mismo sendero, vacio y desolado, huyo con el miedo de ser atrapado, ¿porqué? no se, eso no lo  entiendo, “no por favor ya no mas (grito)”, todo se vuelve oscuro plumas negras caen del cielo, todo se torna negro una voz angelical me dice, “puedes hacerlo, puedes salir si quieres, lo harás”.

    - Aaah!... ahj... ahj –mi respiración es rápida y mi frente esta empapada de sudor sin darme cuenta comprendo que estoy llorando.

Aun no logro entender que sucederá conmigo no pertenezco a un solo lugar, pero sé que lo entenderé no estoy solo tengo a esta persona que tengo que proteger cueste lo que cueste aun que es un simple humano, claro también están mis amigos, me gustaría a ver sido como él, aun diferente a este lio  que yo le he causado, algo que cada vez que lo recuerdo se me es difícil saber y entender cómo llegamos a esto. Solo había una regla y nunca la había roto, aun me pregunto porque tuve que romperla. Aun cuando ya había pasado mucho en esto y ya tenía ganado mi sobre nombre como el “solitario”.

1

 La ley rota

 

Soy el primero en entrar en la clase, todos van llegando nadie se percata de mí y  no hay señal de que estoy aqui, mi sola existencia es algo terrible así que es preferible no ser notado por nadie.

–Tenemos un nuevo alumno, el es Shin –el profesor lo presento a todos y se quedo callado, le indico su lugar por desgracia el único lugar vacio era a mi lado, los alumnos lo miraron con miedo, esperando a ver si era el único que pudiera soportar estar a mi lado.

– ­hola –dijo tímidamente.

–Hola –respondí.

La clase siguió yo seguí callado como siempre y las miradas no se nos quitaban de encima todas pensando solo una cosa. La campana sonó el receso comenzó.

–soy nuevo en la ciudad, no conozco a nadie, ¿puedo juntarme contigo? –pregunto muy claro.

En ese momento no sabía qué hacer me impacto mucho que reaccionara de esa manera jamás me había pasado algo así, y no podía romper una regla tan fácil y clara.

como veas… soy Ren –sonreí, pero aun no sé por qué había roto la más grande regla, el sonrió.

–creo que no tienes muchos amigos, cierto –dijo con tono sarcástico.

–es correcto no los tengo, pero ahora si. –dije.

Ese día todo cambio sentí la experiencia de tener un amigo común, acabaron las clases, salimos del salón, los alumnos tenían  unas caras de  tan sombrías como si hubieran visto el más grande milagro, llegamos a la entrada cuando de repente.