Estaba en la última hora de clases.
Aunque ya allá pasado demasiado tiempo seguía sintiéndome nervioso con su presencia y mi corazón se aceleraba cada vez que chocábamos miradas.
- Chicos, ahora vuelvo -avisó el Maestro Kim, salio por la puerta, y mi nervios se fueron poco a poco.
- Jungkook -gire mi cabeza hacia la voz de mi amigo Yugyeom.
- mmmh -trataré afirmando que tiene mi atención.
- hay una fiesta este sábado, ¿vienes? -me pregunto, veía un brillo de esperanzas en sus ojos.
- No puedo Yug -hice una mueca, las fiestas no me gustan, hay mucho ruido, huele horrible a alcohol y la ultima vez casi me drogan con una pastilla en mi bebida, suerte que no me gusta la cerveza. A parte tenia mejores cosas que hacer.
- anda Kookie - hizo un puchero y se abalanzó a mi rodeandome con sus brazos impidiendo que lo quitara.
- Yugyeom, ¿q-que haces? -pregunte nervioso por que estábamos a centímetros de nuestras narices.
- no te voy a soltar hasta que digas que si -moviéndome intente soltarme de sus brazos.
- quitate, no voy a ir -seguí removiendo me.
- Kookieeeee -hace de nuevo un puchero y ruedo los ojos.
- no Yugyeom, dije que... -se me atoraron las palabras al ver al Profesor detrás de mi amigo- Profesor -susurré.
- Joven Jeon, Joven Kim -tragamos duro cuando su mirada nos mataba lentamente- cuantas veces tengo que decir que muestras de afectó en mi presencia no -hablo serio- Joven Kim suelte a su compañero -rápidamente Yugyeom se enderezó en su lugar al igual que yo- y le recomiendo que ponga atención, que sus calificaciones van bajando notablemente -luego de enterrar tres metros bajo el suelo al castaño al lado mio me miro a mi y yo solo pude encoger me en mi lugar- y usted Jeon, creó que lo de mi excelente estudiante no estará por mucho si sigue así -asentí bajando la mirada y con un pequeño "lo siento", okay creo que ahora necesitare una silla de ruedas
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Ahora el Maestro Kim y yo nos encontrábamos en su auto, nadie hablaba y el aire era demasiado sofocante, los nudillos de Taehyung estaban blancos por ir apretando el volante.
Ya estando frente a casa, salio azotando la puerta, rápidamente desabroche mi cinturón y salí corriendo dentro de casa.
- Tae yo... -fui cortado por sus manos pegando me contra la puerta- agh -saque un gemido de dolor.
- Tae no, Jungkook -sus ojos mas obscuros de lo normal hicieron estremecerme, estaba acorralado por sus brazos y su cara estaba muy cerca de la mía.
- si-si señor -me volteo una vez dicho eso quedando mi cachete y mi pecho pegados a la madera.
- ese niño te toco -una voz ronca y profunda hablo en mi oído- no me gusta que toquen lo que es mio -fue metiendo sus manos a mi camiseta- ¿verdad kookie? Tu lo sabes mejor que nadie -un jadeo salió de mis labios cuando sus manos recorrían mi abdomen lentamente, mis piernas temblaban- ¿por que lo sabes? Eh kookie ¿por que? -mordió mi lóbulo, otro jadeo y mi respiración se hacia más agitada- contesta -me dijo fuerte.
