Perdon por no haber actualizado, la semana pasada fue de puros examenes y se me hacia dificil actualizar. Pero ya estoy aqui <3 Les aviso que tengan alado muchos pañuelos :)
Funny you're the broken one, but I'm the only one who needed saving.
-¿QUE TU QUIERES HACER QUÉ?-Me grita de vuelta, levantándose de la cama de golpe.
-Hannah, tranquilízate.
-¿Que me tranquilice?.-Dice.-¿Cómo diablos quieres que me tranquilice cuando me estás diciendo que quieres cancelar nuestra boda por... Un niñato al que le gustas, JongDae?
-No estás entendiendo.-Le respondo.
-¡Por supuesto que lo entiendo! Apuesto a que ya se acostaron, ¿No es así?
-¿Qué?.-Digo con el ceño fruncido.-¡No! Hannah ¿Cómo puedes pensar eso?
-Pues dime entonces otra razón.
-¡Hannah, yo lo amo!
-¡No puedes amarlo! Reacciona de una maldita vez, JongDae. Lo único que tienes son hormonas alborotadas, seguro incluso más que las mías.
-¿Te estás escuchando? Porque sinceramente jamás creí que fueras tan tonta.
-¿Y yo soy la tonta? Tienes solo 3 semanas de conocer al chico, ¡No puedes amarlo!
-Pues lo hago. Y para tu información, ese chico me ha causado en 3 semanas todo lo que tú nunca en la vida vas a poder causarme.-Antes de darme cuenta su mano estampa contra mi mejilla, dejándola ardiendo. La puerta de la habitación se abre de golpe.
-¿Qué sucede aquí?.-Grita mi mamá confundida.-Sus gritos se escuchan hasta tres cua...
-¡Sr Kim!-Grita Hannah y se va a su lado.- JongDae quiere cancelar la boda.-Mi mamá se queda en silencio unos segundos antes de empezar a reír dejándonos a Hannah y a mí confundidos.-¿De qué hablas cariño? JongDae sabe que no puede hacer eso, ¿No es así JongDae?.-Me dice viéndome. Yo solo me quedo en silencio y su rostro cambia por completo.-JongDae, te estoy hablando.-Veo al piso.-¿Quieres dejarte de tonterías y decirle de una vez a Hannah que está en un error?
-Es que no es un error.-Le enfrento.-Madre, no voy a casarme con ella.-El cuarto se queda en un silencio escalofriante que me eriza los vellos del brazo.
-¿De qué hablas, JongDae?.-Dice mi madre.
-Él me quiere dejar, por el niño ese.-Le dice Hannah. Y de pronto siento la mirada de ambas quemándome.
-JongDae no va a hacer eso, ¿No es así?.-Me dice mi madre y la veo directo. Su mirada amenaza de una forma aterradora. Mi madre era capaz de hacer muchas cosas cuando usaba esa mirada, cosas que me hacían dudar si la decisión que había tomado era la mejor.
-Creo que no están escuchando. Yo no voy a casarme con Hannah.-Les repito a ambas y mi madre entonces explota.
-¡Tú no puedes hacer eso, Kim Jong Dae! Sabes perfectamente por qué y no te voy a permitir que eches todo a la basura por una maldita aventura que tienes con maldito homosexual.
-¡No hables de JongIn de esa manera! Te lo prohíbo.-Le grito de vuelta.-Yo no te voy a permitir que hables de esa forma de él y mucho menos que trates de amarrar mi vida con alguien a quien NO QUIERO.
-¡No puedes cancelar la boda, JongDae!-Me grita Hannah.
-Maldición Hannah, ¡Cuando alguien de una pareja engaña al otro, NO SE CASAN! Se gritan, se insultan, pero no se casan.-Le respondo gritando.-¿Qué tan poco autoestima has de tener como para casarte con alguien que no disfruta de ti como mujer? Superalo de una maldita vez, yo no te quiero.-Se queda en silencio con lágrimas en los ojos. Su orgullo herido, pero ella es incapaz de dejarlo por ella misma. Se acerca a mi viéndome directo a los ojos.
-Te lo advertí una vez, JongDae. Te advertí que no ibas a jugar conmigo y que si lo hacías, tu estúpido juguete gay iba a pagar por ello. Te dije que podía a llegar a ser la mala del cuento y eso no te importo. Pues ahora es a mí a la que no le va a importar que tan mal se sienta saber que tú solo estás jugando con él.-Señala a la puerta. Volteo a ver, JongIn está ahí parado con las manos a los costados sin decir nada. No estoy seguro de en qué momento llegó, y mucho menos cuánto ha escuchado.-Porque eso es lo único que estás haciendo. Estás jugando a saber qué se siente ser un maldito homosexual, pero ¿Te digo algo? Te vas a hartar de él. Y entonces cuando vengas a mí pidiendo perdón, por supuesto que te perdonaré. Y nos vamos a casar y entonces, nunca más vas a verlo. Porque te juro, JongDae, que tú nunca vas a ser feliz con él, y yo me voy a encargar de eso.-Se da la vuelta y se va de ahí. Mi madre me mira y JongIn también, tiene lágrimas en los ojos y me culpo por cada gota que vaya a caer.
-No intentes jugar con fuego, JongDae.-Me advierte.-Porque te vas a quemar. Y entonces nadie va a estar ahí para ti, porque daría asco estar a lado de alguien que es gay.-Trago duro, porque entonces eso no solo daña a JongIn, a mí también. Ella sale de ahí igual que Hannah y por primera vez, la idea de que mi madre estuviera muerte no me hace daño. Pienso que incluso sería una de las mejores cosas que me podrían llegar a pasar. Veo a JongIn, él está llorando en la puerta. Me acerco a él y lo meto a la habitación cerrando con seguro. Lo abrazo con fuerza y él se desmorona en mis brazos. Solloza y por cada uno de sus sollozos una parte dentro de mí se rompe a cada segundo. Pasan casi 10 minutos y él aún no está calmado. Lo llevo a la cama y el acomoda su cabeza en mi regazo. Acaricio su cabello, no sé si le doy paz con eso pero si me la doy a mí, porque me aseguro de que todavía está ahí, que aún no se ha ido y que está conmigo. Pasan otros cinco minutos hasta que deja de sollozar. La habitación se queda en silencio unos segundos.
-JongDae, ya no puedo más.-Me quedo en silencio y él se levanta para verme directo.
-No hagas esto, por favor.-Le pido, porque sé lo que viene.
-¡Son tu familia! Y ellos no me quieren cerca de ti. JongDae simplemente no puedo. No puedo alejarte de ellos y mucho menos dejar que te dañen.
-¡Ellos no van a dañarme!-Le grito.-No más de lo que me dañarías tú si te vas ahora.
-Perdóname.-Se para y yo caigo al piso, de rodillas viéndolo a los ojos.
-JongIn, no me dejes.-Cierra los ojos.
-JongDae...
-No me dejes. He perdido tantas cosas. JongIn, no te puedo perder a ti. Te lo ruego, no me dejes.
-Tengo que irme.-Se separa de mí.
-JongIn, no lo hagas. Sin ti yo no puedo, Nini, te lo ruego. No me dejes.-Se arrodilla a mi altura y sostiene mi cabeza entre sus manos.
-Te amo tanto, que ahora mismo prefiero irme que seguirte dañando de esta forma.-Su nariz roza la mía y luego me besa suavemente.-Adiós, JongDae.-Se para dejándome ahí, de rodillas. Escucho la puerta cerrarse detrás de él y con él se va cada una de las partes de mi alma.
Estoy solo.
Estoy roto.
Estoy sin él.
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Letters to Juliet 【KAICHEN】
Fanfic¿Qué sucede cuándo siempre has tenido todo, pero de pronto te das cuenta de que en realidad, no tienes nada? Cuando estás por completar tu vida, pero entonces algo llega y lo desacomoda todo, dejándote como algo patético, lo suficiente para no tener...