Capítulo 42

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Narra Juana:

   ¿Qué le pasa a mis padres? Se notaban tan raros cuando hablé de ellos frente a Janet.

   Estaba mirando algunas fotos que Janet me mostraba de sus vacaciones en Moscú cuando la puerta se abrió y mis padres aparecen ahí.

   -Bien, mi amor, aquí estamos- mi mamá, siempre con esa sonrisa tan bella.

   -Sí y voy a quedarme contigo esta noche mientras que tu mamá acompaña a tu tía a casa- dice mi papá.

   -Sí, ¿podríamos ir yendo? Tengo que ordenar mi ropa en la habitación que seguramente mi hermano tiene armada para mí- sonríe Janet, mi papá, siempre tan distraído que seguro no armó una habitación para mi tía.

   -Sí vamos- habla mi mamá dispuesta a arreglar la situación.

   Ambos salen de la habitación dejándome sola con mi papá.

   -Papá, cuéntame, ¿cómo fue que consiste a mamá?- pregunto para pasar el tiempo.

   -Bien, en realidad ella y yo. . . Tú y yo. . . Ella y. . .

   -Permiso, ¿puedo entrar?- oigo que la puerta se abre. Al ver del otro lado, mis ojos se llenan de lágrimas.

   -¿Manuel? Yo. . . No te esperaba- digo secando una lágrima.

   -Me acabo de enterar que mi novia está mal, ¿esperabas que me quede de brazos cruzados?- sonríe dulcemente mientras se acerca a mí.

   -Los dejaré sólos- Michael se pone de pie y sale de la habitación.

   Me quedo por un segundo mirando a Manuel, estaba tan lindo ahora. Sin embargo, ya no sentí la misma pasión entre nosotros.

   -¿Cómo estás?- se acerca a mí y me abraza- Te he extrañado.

   -Yo también- dejo un beso sobre sus labios.

   -Te amo- deja salir de su boca.

   -Gracias por hacerlo- vuelvo a besarlo mientras él se sienta a un costado de la cama.

   Lo beso por un largo rato, ese beso se volvía apasionado a lo largo del tiempo. Extrañaba esto, definitivamente.

   -Permiso- una voz grave hace que me separe de él-. Hola- era un doctor- ¿cómo estás?

   -Mejor, gracias- contesto.

   -Bien, ¿adivina que?- habla con un cierto tono infantil en su voz- He visto su evolución y pude determinar una cosa, ya estás lista para salir de aquí. Mañana a la mañana ya puedes irte- una emoción rara invadió mi cuerpo.

   Me sentía alegre por saber que volvería, pero también me daba miedo volver a recordar todo lo pasado.

   -Bien, gracias- el doctor asiente y sale de la habitación.

   -¿Qué te parece si salimos a cenar, mañana a la noche? Para festejar- propone Manuel. Asiento con la cabeza mientras sonrió.

   -Buenas noches, le recuerdo que el horario de visita está por terminar- aparece una enfermera en la habitación.

   Manuel asiente con la cabeza, deja un beso en mis labios, se despide de mí y sale acompañado por la enfermera.

Narra Michael:

   Estaba sentado sólo cuando veo a Manuel salir de la habitación. Se acerca a mí y me sonríe.

   -Gracias por llamarme y juntarme de nuevo con Juana- dice sentándose a mi lado.

   -Por nada, igual recuerda que lo hice por ella. No quiero que vuelvas a lastimarla.

   - No lo haré- se pone de pie con una sonrisa y se va del hospital.

   Entro a la habitación de Juana, ella estaba con la vista perdida mirando hacia la ventana. Me acerco a ella y dejo un beso sobre su mejilla.

   -El doctor dijo que podría salir mañana a la mañana- habla con la voz apagada.

   -¿Manuel dijo algo que te incómodo?- pregunto.

   -No, es sólo que. . . Como que ya no hay la misma pasión que antes. Ahora no siento nada al besarlo- eso definitivamente me partió lo que me queda de corazón.

   -Paciencia, ya aparecerá alguien que te ame bien- la abrazó-, pero, mientras esperas a ese alguien, duerme. Así cuando llega tienes las energías llenas- ríe. Amaba esa risa suya.

   -¿Podrías quedarte aquí? A mi lado- eso me sorprendió.

   Me recuesto a su lado y la abrazo. Beso su nuca hasta que ambos nos quedamos dormidos.

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⏰ Última actualización: Jun 09, 2018 ⏰

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