Al otro día, Aixa se despertó y lo primero que vió fue una muchedumbre frente a ella.
Vió el cuerpo sin vida de su rival e intentó esconder su satisfacción. El resto de las personas, con lágrimas en los ojos, veían aquella escena que aunque para todos era tétrico y trágico, para ella era lo más satisfactorio que sus ojos podrían haber visto. Estos habían perdido su dulzura y su brillo, como si de alguna manera su alma y su cordura hubiesen abandonado su cuerpo.
De repente, miró las fotos que se encontraban pegadas en la pared.
La imagen de Aitana también estaba tachada con rojo, como la de su difunta hermana. Aquello le causó una pequeña sonrisa que ocultó para no ser vista, pero que, sin embargo, ahí estaba.
Bruce lloraba. El corazón de Aixa dió un pequeño brinco al ver el dolor que la muerte de su contrincante había causado en su amado. Y, sin sentir pena o remordimiento por lo que había hecho, se acercó a su predilecto y le abrazó por la espalda intentando transmitirle al moreno que estaba dolida como él. Éste sostuvo los brazos de la pelirosa alrededor de su cintura, como si de alguna manera y sin girarse, correspondiera al abrazo que ésta le ofrecía. De repente, una voz comenzó a chillar.
—Bueno, comencemos la "Autopsia General" —dijo el jefe y soltó una carcajada—Por cierto, asesino o asesina.. Lo has hecho bien..
Aixa pensó que Marshall la había visto. Pero, que su plan era saber cual sería el primero que mataría al resto y asi terminar por exterminar a todos los adolescentes que allí estaban. Nuestra pelirosada no tenía intenciones de matar a todos, sólo a los que se interpongan entre ella y su querido. Sólo a ellos. No a los demás.
Marshall explicó las pautas que serían utilizadas para la "Autopsia General" que, basicamente, era un juicio entre todos para saber si podrían adivinar quien fué el asesino o porque murió la victima en primer lugar. Básicamente, si descubrían quien era el asesino, éste sería llevado al exterminio o se dejaría en manos de sus compañeros su destino final.
Una vez pautadas esas reglas, el juicio comenzó. Se sentaron en circulo y colocaron el cuerpo en medio de ellos.
Bianca, que era la más experimentada en ciencia, se acercó al cuerpo. Una vez que lo tenía de cerca, comenzó a cortar su estómago con un cuchillo. Abrió su estómago y verificó que no había rastro de veneno.
Aixa, que hasta el momento temblaba como un papel, se tranquilizó.
¿Quizá el veneno ya se había dispersado?
Aixa nunca lo supo, pero su satisfacción no cesó por eso. Sin embargo, luego de un rato, se determinó que Aitana había muerto por causas naturales.
¿Como podía ser? ¿No la había asesinado en realidad?
Aixa comenzó a dudar sobre la verosimilitud de su crimen.
¿Podría ser que él veneno no hubiera funcionado y que ésta murió luego simplemente porque le tocaba?
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La Llamada del Suicidio
Mystery / Thriller12 adolescentes. Una llamada. Un experimento. Una voz que engaña.