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Ethan caminó hacia su mesa ejecutiva, y yo donde estaba el Dr. Mathew, tratándome de regañar. Al sentarnos, Mathew comenzó a contar sobre su llegada al hospital, le podía todas las ganas para concentrarme en el relato y olvidar ese baile.
-Con el Dr. Ethan, somos compañeros.
-¿Compañeros?, ¿de la escuela...universidad...? Dije
- No... soltando risas. Continuó: -Compañeros de traslado, ese día que llegó él, también llegué yo.
-Lo siento, yo no escuché sobre tu llegada...
-Lo que pasas es que no quería que se hiciera tanto alboroto, mantuve un perfil bajo. Algo dijo entre dientes... Lo importante es que ya me conoces...
-¿Qué?
-No, nada.
Así seguía trascurriendo la fiesta, me contaba sobre los casos más vistos en emergencias, también me mencionó que faltaba una enfermera en su servicio que era indispensable en emergencias. Tuve una idea, quería trasladarme a ese servicio... Por lo que me contaba el área era amena y llena de compañerismo, así que no era mala idea. Después de unos minutos, me acerqué al director, estaba en la misma mesa que Ethan, por lo que lo llamé hacia un lado, le pedí este favor y respondió con asombro: -Claro, si ya no te sientes cómoda allí, te doy permiso, dentro de una semana estarás trabajando en esa área. Le respondí: Gracias, sabía que usted comprendería.
La fiesta aún no terminaba y me decidí a bailar, primero con mis amigas, compañeras, pero más con Mathew. Por su parte Ethan todo lo que hacía era observar, llenando su copa de vino. Una canción nuevamente irónica comenzó, esta vez me causó gracia...
...Una cerveza voy a tomar, una cerveza voy a tomar para olvidarla... Porque vos se nota que no me querés, se nota que no hay amor.... Yo me dedico al alcohol...
Luego de esta canción, paso una hora, e Ethan se retiró de la fiesta. Cuando terminó todo, casi todos los invitados estaban muy tomados, pedían taxis ya que no podían conducir. Yo me dispuse a hacer lo mismo, cuando Mathew me dijo: - Tú sola no irás, te acompañaré a casa.
Estaba tan cansada que no abrí la boca para negarme y subí al taxi, le dije mi dirección y él también subió, el auto se puso en marcha. Cuando llegamos, casi estábamos dormidos, los dos, con los ojos entreabiertos, me ayudó a subir las escaleras. Y cuando pasábamos por una de las ventanas que colindaba a la puerta principal, vi a Ethan parado en frente del condominio, observándome; luego de esto, subió a un taxi estacionado y desapareció. No le tomé importancia, pensaba que lo confundí con otra persona.
Llegamos a mi puerta, abrí la puerta. Mathew dijo: -Permíteme por un momento los servicios... necesito despertar completamente para irme a casa.
Lo dejé pasar. Él estaba en el baño, mientras yo me ponía el pijama. Pero me tardé en cambiarme por la pesadez que tenía en el cuerpo. Cuando salí a la sala, encontré a Mathew tirado en mi sofá completamente dormido, era un roble, no pude despertarlo. Tuve que cerrar mi puerta con seguro para dormir, por las dudas.
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Un amor del ayer
RomanceEs una pérdida de tiempo tratar de entender como funciona el amor, porque ai hay algo verdaderamente cierto en esta materia, es que el romance surge cuando uno menos se lo espera y casi siempre llega de la manera que jamás habíamos imaginado. Supong...