Si algún día no podemos estar juntos...

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...guárdame en tu corazón. 

Mi cielo infinito...

¿Sabes? Aun no se porque estoy haciendo esto, definitivamente yo no debería de estar escribiendo estas lineas, pero aun así... aun así lo estoy, estoy aquí con un bolígrafo en mi mano, plasmando cada palabra que dicta mi corazón, que curiosamente se ha puesto de acuerdo con mi razón, porque ahora escribo estas hojas, escribo esta carta que no se si llegaras a leer.

Lo recuerdo tan bien, Tú... solo llegaste un día y entraste a mi vida sin avisar, fue un simple "Hola" lo que marco nuestro destino, lo que dio inicio a nuestra amistad, quien diría que esto fuera fuera a cambiar y volverse un sentimiento tan bello y a la vez doloroso.

¿Recuerdas todas esas tardes en las que conversábamos? Solías contarme todo lo que hacías al final de tus clases, también me contabas sobre las tardes de estudio, cuando salias con tus amigos. Tus cumpleaños, los míos,  nuestras tardes imaginando otros mundos, en los cuales te volvías una sirena y yo te acompañaba en mi pequeño bote, recorriendo el mar, también aquellos en donde tu eras el valiente caballero que luchaba contra el feroz dragón, que por cierto, jamas lograste vencerlo.

Como olvidar las pequeñas discusiones, siempre terminaba por escuchar tus regaños por no tomar mis medicamentos a tiempo, al igual que tú escuchabas los míos porque intentabas ocultarme sobre algún pequeño accidente que hubieras tenido, solo para no preocuparme. Rescatar animales abandonados, sufrir con nuestras familias porque al final siempre  terminábamos con adoptar a esos pequeños indefensos que sacábamos de la calle, los cuales se volvían como nuestros hijos, comenzando así otra pelea por saber que nombre darles.

Parece mentira... pero hemos pasado por mucho, bueno, malo, pésimo... te he visto llorar así como tu a mi, haz sido mi punto de apoyo y mi fuerza para seguir, tal y como yo lo he sido para ti. Estuviste para mi cuando mas mal me encontraba, has evitado tantas veces que cometa estupideces, que ahora no se que sucederá conmigo, nunca fui la persona tan fuerte y valiente que imaginaste. 

Aun  pienso en ese día de diciembre, cuando sin avisar, me sorprendiste como solo tu puedes hacerlo. Me confesaste tu amor, me pediste que sin importar cual fuera mi respuesta jamas dejáramos de hablar, porque soy... o fui muy importante para ti,  no querías que me alejara, querías seguir conversando, seguir discutiendo, seguir soñando, querías muchas cosas.

¿Cual fue mi respuesta? ninguna... porque en realidad nunca la di, solo te dije que no podía olvidar lo que acababas de confesar, porque seria cruel de mi parte ignorar tus hermosos sentimientos. Pero al final eso fue lo que hice... ser cruel contigo, todo por que tenia miedo. Miedo, no por el hecho de que ambos somos hombres, ni por lo que diría mi familia o la tuya, jamas me ha importado eso, si no miedo a perderte, miedo a que se terminara la magia que nos mantenía unidos, miedo porque siempre veía que la gente a mi alrededor terminaba mal, miedo a que me pasara lo mismo que a nuestros conocidos, me llene de tanto miedo que decidí que lo mejor seria olvidar y seguir como siempre, siendo amigos. Que estúpido de mi parte, porque es obvio que jamas olvide.

Ha pasado tanto desde ese día, que no importa que, siempre tengo presente esa confesión, pero ya no puedo hacer nada, porque tus ojos ya no me ven solo a mi, tus sonrisa ya no son solo para mi, tus secretos tampoco lo son, ahora tienes a alguien que si es valiente y sabe arriesgarse, se que esa persona te cuidara y te amara, aunque eso signifique que te vayas de mi lado, es tonto lo se muy bien, pero ahora, no tengo mas opción que aceptar tu partida.

Recuerda mi cielo infinito de primavera, que yo siempre estaré en tu corazón así como tu lo estas en el mio. Te deseo toda la felicidad del mundo y que tu sonrisa jamas se apague.

Te quiere y te amara por siempre... 


Tu cálido sol de otoño.

Pensamientos para mi cielo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora