Finn llegaba algo cansado a su nueva casa, en donde vivía con su novio Jack. El pequeño se encontraba durmiendo en el sofá, haciendo que Finn sonría al verlo e irse a su habitación, sin avisar de que volvió.
Jack a los minutos se despierta, viendo que estaba todo oscuro. Comienza asustarse un poco, buscando su celular desesperadamente hasta que lo encuentra. Lo agarra y lo prende, para irse directo a su habitación.
Al abrir vio a su novio Finn, quién estaba durmiendo, roncando. Aún traía la ropa puesta, Jack sonrió bobamente y se acostó a su lado. Finn se despertó y vio a Jack, no dijo nada solo se dio la vuelta para darle la espalda. Jack creyó que le diría algo lindo, como todas las noches.
En fin, el menor dio un último suspiro y se dio la vuelta, para también darle la espalda y quedarse dormido.
Al día siguiente.
Jack se despertó, haciendo su vista para ver si aún seguía Finn y para su suerte, si. El menor se acercó a él y darle varios besos, haciendo que este comience a despertar poco a poco.
—Hola bebito... – fue lo único que dijo Finn.
—Ya levántate, no quiero quedarme solo y aburrido. – contestó Jack, de una forma dulce, a Finn no le importó y siguió durmiendo.
Jack se levantó y fue hacerse el desayuno. Al final y al cabo, el menor desayunó solo ya que aún Finn seguía durmiendo.
Este se puso a pensar en algo bonito para hacer hoy con su novio; como salir juntos o ir al cine. El celular de Jack lo sacó de sus pensamientos, ya que lo llegó un mensajes y era de su amigo, Wyatt.
Wyatt.
Oye Jack, ¿Quieres venir hoy a casa? Mí hermano me compró un nuevo videojuego y pensé en que podríamos usarlo nosotros.
Jack dudo un poco, no sabría bien si Finn lo dejaría.
Jack.
Wyatt, no lo sé.
Jack a los minutos escucha los pasos de Finn bajando por las escaleras, no le importó y espero a su amigo a qué le respondiera, aún teniendo una sonrisa boba en su rostro.
Finn lo observó y se acercó, golpeando la mesa para hacer que Jack lo miré. El menor lo miro con una sonrisa, haciendo que Finn rodeé los ojos.
—¿Por qué te hablas con ese? – dijo Finn, seriamente. El menor tragó saliva y se levantó. —Responde.
—Finn... Sabes bien que Wyatt es mí amigo, no tienes que preocuparte. – contestó Jack, un poco miedoso. No sabría bien que haría Finn ya que se lo encontraba muy enojado.
Finn rodeó nuevamente los ojos y miró la mesa, para volver a mirar a Jack.
—¿Y mí desayuno? – hablo Finn, golpeando la mesa. —¿¡No me hiciste el maldito desayuno!?
—Y-yo.. Ya te lo preparo, t-tranquilo. – contestó Jack, alejándose de su novio e irse hacer el desayuno para su novio.
Jack estaba haciendo waffles en forma de corazón, solo para su novio ya por qué lo amaba mucho. Finn se acercó a este y lo abrazó por detrás apoyando su cabeza en el hombro del menor.
—Hoy saldré y no se a qué hora volveré, no me esperes. – susurró Finn, dándole un beso en la mejilla, haciendo que Jack suelte un suspiro.
—Pero promete que volverás temprano, no quiero estar solo otra vez. – contestó Jack, bajando la mirada y darse la vuelta para ver a su novio.
—Me fijaré, pero no prometo nada. – dicho a eso, Finn tomó su desayunó y se lo llevó a la mesa, para comenzar a comer rápidamente.
Jack estaba perdidamente enamorado de el, que aveces lo odiaba por su comportamiento. ¿Jack podrá darse cuenta que Finn no lo ama, que solo lo usa?
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