Gracias.
Quiero empezar agradeciendo todo lo que diste por mi sin que te dieras cuenta.
Por haberme enseñado que no siempre se obtiene lo que uno quiere, incluso si lo desea más que algunos.
Por hacerme ver que no toda la gente en el mundo es una maldita basura.
Agradecerte por hacerme mejorar, que aunque no mejore por mi, lo hice y fue lo mejor.
Agradecerte por dejarme permanecer a tu lado y amarte el tiempo que me lo permitieras no me alcanzan y no hay palabras con las que yo pueda decirte lo que siento.
Hay tantas cosas que quiero agradecerte, pero jamás terminaría de nombrarlos, porque eres tú, así de simple.
Quiero agradecerte tantas cosas pero, también quiero maldecirte.
Maldigo tu estúpida sonrisa, esa que tenía una especie de magia que hacía que me sintiera la mujer más afortunada por sólo tener el privilegio de verla.
Maldigo tu voz, esa que cuando la escuchaba me llenaba de gozo.
Maldigo tus ojos, tan profundos y preciosos llenos de una luz tan linda, que cuando me miraban, sabia que veía más allá de donde nadie jamás había entrado.
Maldigo tu encantadora forma de ser, tan refrescante cómo una brisa de verano, tan adorable y verdadera que me hacía amarte cada vez más.
Maldigo, maldigo, maldigo, maldigo la forma en que me gustas, pero sobre todo maldigo que no poder odiarte.
No podría.
¿Cómo odiar a alguien que, en algún punto de tú triste vida, se volvió alguien tan importante?
Alguien que te dio un motivo para reír y que con el más simple de los mensajes le alegraba tanto el día.
Simplemente maldigo todo. Todo excepto, el momento en el que te pude conocer.
Porque a pesar de todo, me alegro de a verte conocido.
Jamás pudiste amarme pero, yo te amé de una manera que me hacía sentir completa y si no me amaste, estoy bien sabiendo que le entregue lo más hermoso que le pude entregar a alguien sin la necesidad del sexo.
Siempre tendrás unos brazos para apoyarte cuando lo requieras.
Por favor, encuentra a una persona que valga todo, dame una razón para por primera vez estar muriendo de celos.
Deseo que tu cielo nunca esté nublado, o al menos no siempre.
De corazón, quiero que encuentres a la persona que te haga sentir como tú me hiciste sentir a mí, pero que todo salga como quieres.
Ama, cuídate, y por favor, no olvides que en algún momento hubo alguien que te amo tanto que no le importó dejarte ir para que buscarás a ese "ALGUIEN" especial para ti, aún sabiendo que eso la mataría.
