Martes por la noche la brisa de verano se sentía y yo me encontraba desnudo en mi cama tapado con una sabana que apena y cubría mis muslos el calor era abrumador estaba demasiado caliente mis mejillas ardían y me revolcaba en la cama buscando una posición cómoda pero nada me hacía sentir bien.
Una silueta paso de mi ventana a mi habitación nunca me percaté de eso pues mis ojos se encontraban cerrados jadeaba y gemía nunca debí aceptar lo que me dio aquel chico rubio.
Es una historia yaoi basada en la vida de mi hermanastra.
Adaptada al yaoi