Mi sobrino, un refugio para mi soledad

#Negativo

Analia

Toco la carne con el dorso de mi dedo nuevamente y ahora ya no está tibia, esta fría completamente.

Suspiro pesadamente y miro la hora en el reloj del celular, cierro los ojos con fuerza cuando un trueno hace vibrar las ventanas de mi casa, me pongo de pie y abro la bolsa de la farmacia y saco el test de embarazo, me vuelvo a sentar y reviso si mi esposo mandó si quiera un mensaje... Pero nada.

Sollozo ahogada sintiendome impotente, nerviosa y angustiada...

Espero un rato más, miro por la ventana como llueve con fuerza, parece que el cielo va a caerse, mientras la cena especial, entre comillas... Se enfría, mejor dicho, se congela.

Miedo el último mensaje que mi esposo me mandó y mi garganta se cierra "No seas dramática nena, voy a llegar para la cena y para que después hagamos el test juntos, los dos tranquilos y juntos"

- Dramática tu maldita abuela muerta - Sollozo tomando la bandeja con carne azada para luego tirarla en el bote de basura, sollozo y sus palabras pinchan en mi mente "Amor, necesito que confíes en mi, te amo y nunca haría algo que te dañará nena... Confía en mi Ani, estoy trabajando duro para que no nos falte nada, ni a vos ni al bebé que pronto llegará a la familia"

Sollozo tapando mi boca y en un arrebato de valentía, tomo el test y camino hacia el baño...

El sonido de la llamada de corta, como las dos veces anteriores, nuevamente comienza a sonar y está vez, lo atiendo

- Hola, hola Ani... Ani me escuchas? - Pregunta Sergio del otro lado de la línea

- Acá estoy - Contesto con la voz algo ronca, mi esposo suspira

- Nena estoy sin señal atrapado en el aeropuerto, no pude tomar el vuelvo por la tormenta, voy a llegar recién mañana al mediodía, no puedo hacer más que esperar bebé - Rápidamente explica mientras la llamada de entrecorta un poco

- Está bien - Respondo sobando mi nariz

- No te hagas la prueba, esperame así la hacemos juntos como lo planeamos amor. Voy a tomarme un taxi desde el aeropuerto, al llegar, no voy a buscar el auto a la oficina, así voy a llegar más rápido - Promete mientras un par de lágrimas caen de mis ojos

- No te apures - Susurro con mi garganta cerrada

- Quiero hacerlo amor, vas a ver que pronto estoy en cas..- Comienza a decir Sergio

- Dió negativo... No estoy embarazada, anda a buscar el auto, no hay tal apuro - Murmuro interrumpiendolo

- Ani, yo.. - Dice mi esposo después de un corto silencio...

Pero no lo escucho, corto la comunicación y dejo el celular a un lado, tomo la copa de vino blanco y la llevo a mis labios...

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Muerdo las uñas de mis dedos y las pieles de los costados, son las dos de la madrugada y hace poco dejo de llover, muerdo la piel de mis labios con nervios e indecisión y tomo mi abrigo y mi billetera.

Con las manos en los bolsillos y la cabeza gacha, camino por la avenida hasta que me detengo en una esquina, trago saliva y mis pies doblan solos para seguir camino hacia la derecha... Ya conozco el camino, tantas veces lo hice, ingenua yo que pensé que nunca más iba a volver aquí, ingenua yo que pensé que era más fuerte y que había superado y cerrado viejas y oscuras puertas.