Primer día

35 5 8
                                    

Propuesta: Los padres de Tomas habían arreglado una reunión con mi madre quién ahora estaba sentada elegantemente en una silla fina. En la sala.

—Bien —Dijo el señor Aden acomodándose— Tenemos una propuesta para usted dijo viendo a mi madre y sosteniendo la mano de su querida esposa Leslie.

—Si, lo sé, por algo quiso que vistiera formal —sonrió mi madre gustosamente soltando una risa, el señor Aden sonrió.

—Le propondré que su hija y mi hijo se casen, un matrimonio arreglado.

Mi madre se quedo atónita, y yo desde mi lugar un poco alejado abrí mis ojos como platos y me quede asustada.

¿Cómo? Es decir... Nunca pensé en casarme con Tomas y mucho menos que él estuviera obligado a casarse conmigo.

Él señor aclaro su garganta, se que va a insistir.

—Piense en los benéficos que tendría —y como dije, él insistió.

—Pero si nosotros somos una familia común, un poco arriba de la clase media —dijo mi madre.

—Lo sé —dijo el señor Aden— pero, ¿por qué no habría de querer esta unión? Es decir, usted es una mujer inteligente la necesito en la empresa, y su hija es la candidata perfecta.

En ese momento intente decir algo pero me quede callada.

—Lo pensaré —dijo mi madre levantándose—  hija —dijo suavemente— ¡vámonos!.

—Voy —dije levantándome, hicimos unos gestos de despedida y nos fuimos.

Ya en casa mi madre hizo caso omiso a todo lo demás y se dedico a decirme lo bueno de este matrimonio.

—Es falso —alegué, mi madre revolo los ojos.

—Hija estás grande, piensa en tu futuro —me miro y dijo esto es algo que debe ser cierto.

—No mamá, claro que no, ese chico no quiere casarse conmigo, y no quiero casarme con alguien como él —Es tan egoísta y… extraño, todo un presumido —refunfuñe.

Mi madre me miro y se acercó con decisión.

—Piensalo —dijo.

Se levanto y antes de marcharse mencionó un, esto ya es cierto, tu te casarás.

Ahogándome en TomásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora