TE QUIERO SOLO A TÍ

CAPÍTULO 15: DOBLE PREMIO... ¿O MÁS BIEN CASTIGO?

POV CHRISTIAN

Logro quitarme de encima al imbécil que me está golpeando y me incorporó rápidamente. Busco con la mirada a Anastasia y ella se está cubriendo con el sillón, porque no le aterran las situaciones de riesgo, por lo que veo, lo que le aterra es que la vean desnuda, y a comparación de mi, ella si está completamente desnuda. Yo solo me bajé los pantalones un poco.

Le lanzo su vestido y se lo pone rápidamente, y justo cuando estoy por tomar el auricular del teléfono, escucho un chasquido y siento como se va helando mi sangre de golpe. Al girar, el "INI" está sosteniendo a Anastasia por el cuello y tiene una pistola apuntando a su cabeza, con el cañón pegado a su sien.

-Haz esa llamada, y ella morirá - gruñe el tipo.

Es más o menos de mi estatura, un poco más robusto que yo. Alcanzo a ver por los orificios del pasamontañas que cubre su cara que es caucásico y tiene los ojos azules.

-Tranquilo, amigo... Arreglemos esto entre hombres, a ella déjala en paz - trato de conciliar con él.
-Cierra la boca, y sal de la casa - ordena el tipo y presiona la pistola sobre la piel de Ana.

Ella solo respira agitada y aprieta los ojos. Yo no tengo idea de como lidiar con un loco armado. Esas cosas me desagradan y me dan mucho miedo. La verdad.

El tipo me arroja mi chaqueta del trabajo y le da un abrigo a Anastasia. Vuelve a encañonarla y nos dice con un movimiento de su cabeza que salgamos del departamento y que no hagamos una idiotez. En ningún momento suelta a Anastasia y por que no le haga nada me tengo que someter a la voluntad de este cabrón.

Salimos y nos lleva a una vagoneta estacionada en la parte trasera del edificio y subimos en ella. Al entrar vemos a otros dos tipos, pero ellos van armados con ametralladoras. Esto ya es muy malo.

A Ana le atan las manos al frente con cinta americana, a mi, me atan con las manos a la espalda, igual con cinta, y a ambos nos amordaza metiéndonos un pañuelo a la boca y cubriendo con más cinta.

Anastasia durante el camino a no sé donde se mantiene llorando en silencio, yo me siento apenado y culpable de que estemos en esta situación.

* * *

Tras varias horas de camino, y sin poder cerrar los ojos, ninguno de los dos; llegamos a un área boscosa. Nos hacen bajar y sentimos como las piedras en el suelo nos lastiman los pies. Nos meten a una choza bastante maltratada y al atravesar la puerta nos guían ahora a una habitación y cierran con pasador la puerta.

Ana contempla el entorno y se seca con furia las lágrimas. Yo por el contrario, no sé qué hacer. Vemos una colchoneta en el suelo y una cobija. No están sucios, pero tampoco es como que quisiera dormir, aunque estoy muy cansado y me duelen los golpes que me dio el tipo que nos sacó del edificio.

Ana se acerca a la colchoneta y la estira sobre el suelo, toma la manta y con señas me indica que me tumbe y descanse. Le indico que ella también se acueste y al traer las manos en la espalda y ella al frente, me ayuda a acomodarme sentado. Se acerca y como puede se acomoda entre mis piernas y pasa sus manos sobre mi cabeza y queda abrazada a mi. Es un gesto bastante íntimo, incluso para mí.

De inmediato se ha quedado dormida y yo me quiebro la cabeza pensando en quien habrá sido que nos secuestró y que quiere. ¿Si me quieren a mí, que necesidad de hacer a Anastasia pasar por esto...?

* * *

Siento como nos cae a Anastasia y a mi un balde de agua helada, y escucho las carcajadas de un cabrón, hasta que logro abrir los ojos veo al tipo que nos sacó del edificio. Levanta a Anastasia de mi regazo con brusquedad y acto seguido le da una fuerte bofetada que hace que caiga al suelo. Yo, atado y amordazado tiemblo de ira e impotencia. ¡No sé que hacer!