N/A: Chicas no tienen idea lo emocionada que estoyyyy! ¡Somos numero #1 en el hastag Skate Maloley! Es imposible, muchísimas gracias por las fieles lectoras que están aquí desde el principio, por las nuevas o todas las que alguna ve, se han cruzado con esta novela, muchísimas gracias en serio, ¡Ya tenemos mas de 4k lecturas! Simplemente es asombroso, gracias x todo❤
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Habíamos llegado a L.A como las ultimas semanas, era lunes, y lo primero que tenia que hacer era ir al estudio.
—¡Buenos días señorita Morgan!
—Buenos días Melissa.
Melissa era la recepcionista, me la llevo súper bien con ella, además, últimamente a estado algo interesado Jack J en ella, así que tengo que hacerla mas mi amiga para que pronto salgan juntos. Soy tan buen amiga.
—Buenos días Morgan.
—Buenos días.
Mi Mánager estaba en la cabina de grabación con dos personas hablando sobre el sonido, no les tome importancia y entre a la cabina de grabación, en estos momentos, me encontraba grabando dos canciones mas para el álbum Deluxe que sacare, ya que contaba con la versión normal y la versión de “De lujo”.
—Morgan, ven aquí —golpea la ventana.
Salgo de ahí y camino hasta la sala de grabación.
—¿Que sucede?
—Quiero que conozcas a estas personas, ellos serán los encargados de agendar las fechas en los lugares para la gira mundial.
—¡Oh, genial! —estreche la mano de las dos personas y comenzamos a charlar.
Mi álbum seria lanzado en Julio y la gira comenzaría en Diciembre, es algo apresurado, lo sé, pero es algo que llevábamos planeando desde hace dos años, así que ya lo teníamos que sacar, y aun que los fans, ni Derek, saben sobre la gira, me romperá el alma decirse lo, decirle que me iré por 10 meses al rededor del mundo, menos ahora que nos mudaremos juntos.
A casi 5 horas de estar ahí, mi mánager me deja salir antes para comer, dijo que lucia cansada, así que me iré. Mientras caminaba a la entrada mire que Melissa (la chica de la recepción) estaba hablando con otro chico rubio, y aunque tenia parecido a alguien... Decidí ignorarlo y pase de largo a su lado.
—¡Oye! —me llaman.
Me detengo y doy la vuelta confundida.