Apostando Un Corazón (THORKI)

3.

Tercera persona

-me puedes explicar ¿Cómo fue que accedí a vestir esto?- pregunta Loki acomodando su ropa nuevamente, apenas una tela por delante y otra por detrás y unas mallas con agujeros que dejaban poco y nada a la información.

-vamos, Loki, estamos atendiendo esto para caridad y accediste con gusto- sonríe acomodando la falda que tenía puesta- te gusta sentirte deseado.

-no tengo esos extraños fetiches tuyos- habla negando mientras arregla su cabello.

-Aún así aceptaste sin poner mas peros, así que ahora ¡ve a trabajar!- Tony le da un leve empujón y Loki sale con su actitud de siempre aunque por dentro se muere de vergüenza, pero no le dará la satisfacción al resto de hacer aquello.

Aceptó de mala gana participar en el café que Tony comenzó a manejar con el fin de ayudar a un orfanato cercano, sólo serían unos días para captar clientes y luego todo acabaría... según había dicho Tony.

Sólo serían unos días, recaudarían dinero para caridad y el podría librarse de los exóticos trajes que Stark traía siempre. Simple y sencillo.

Pero no había nada simple en aquel cliente persistente. Aquel rubio y muy fastidioso cliente persistente. 

Loki intentaba mantenerse profesional, a pesar de las extrañas vestimentas que usaba, intentaba de todo corazón no hacer caso a las insinuaciones del rubio, aunque lo único que le provocaba era darle un fuerte puñetazo en la nariz. 

-¡Loki!- grita una chica a la distancia y el moreno se acerca con una leve sonrisa- ¿cómo va todo?- pregunta ella mientras el rubio frente a ella deja un beso en su pálida mano.

-Wanda, Vis, hola- sonríe mirándoles- las cosas van bien, aunque podría ser mucho mejor si vinieran mas personas a comprar que a mirar- suspira notando como los demás se movían entre las mesas llenas de alfas.

-No puedes culparles, son muchos omegas hermosos aquí- sonríe mirando a un ágil Peter Parker atender algunas mesas- ¿dónde están los demás?

-Pietro, Charles y Kurt tienen clases, y Bruce esta en la cocina- habla indicando una pequeña ventanilla por la que apenas se veían las manos del castaño- Pepper dijo que vendría a ayudar mas tarde. 

-ya veo, bueno, nosotros solo hemos venido como clientes- sonríe- lo siento. 

-en tu condición, querida, no te dejaríamos ni tocar una bandeja- la chica sonríe acariciando su apenas perceptible vientre- así que Vis, más te vale cuidar de la chica ¿oíste?

-fuerte y claro- sonríe el rubio para acariciar la mejilla de su prometida. 

Loki toma el pedido de la feliz pareja y luego de llevarles sus cosas y una generosa cantidad de pastel de manzana, se les queda observando unos minutos. 

Wanda rebozaba de alegría, bien sabía el que el tema del embarazo era difícil para ellos aún, ambos sin un trabajo estable, apenas terminando la universidad, comenzando ella en el caso de Wanda, sin una gran familia que los apoye. Todo era complejo. 

Aunque, siempre estaban ellos, por extraño que pareciera, su grupo de amigos era más una familia que otra cosa. Se molestaban, si, se hacían bromas pesadas muchas veces, incluso llegaban a ser irritantes, pero cuando uno de ellos necesitaba algo, los demás siempre estaban ahí para él. 

Loki tenía experiencia en ello, siempre había sido un omega hermoso y lamentablemente llamaba la atención indeseada de muchos alfas, es por ello, que Natasha y Tony siempre iban a su rescate.

La campanilla puesta en la puerta suena, sacando al moreno de sus pensamientos, y es cuando se gira, que su sonrisa desaparece. 

-Hola, me gusta tu traje- sonríe bobamente el rubio mientras le entrega un pequeño ramo de flores, camelias rosas.

-hoy tu novia no ha venido- afirma mientras el rubio niega. 

-no es mi novia, sólo una amiga con derechos- Loki niega para tomar una bandeja e ir a las mesas a entregarlas, mientras Thor se sienta en la misma mesa que ocupa cada día.

Loki ya no pelea, solo le lleva su pedido al igual que cada día para ir a atender las mesas sin tomarle importancia al rubio. Aunque en el fondo, cada vez que tiene unos segundos libres, 

Cuando al fin llegan los demás, Loki y Tony se permiten un pequeño descanso. 

-¿una camelia?- pregunta al ver la flor a un lado, a la vez que Loki también le mira- eres el mas bello... y ¿confianza?- pregunta viendo al moreno. 

-seducción a través del romanticismo- Loki hace una mueca mientras niega- no creo que ese bruto sepa el lenguaje de las flores. 

-no, eso es seguro, sino, te traería solo flores rojas- ríe el castaño para luego mirarle un poco serio- cuando le dirás lo de Sif. 

-no tiene porqué saberlo, es algo entre ella y yo- habla suspirando. 

-deberías decirle- Loki abre la boca para hablar pero es interrumpido- vamos, es su amiga y tu verdugo, no puedes simplemente hacer como que nada pasa cuando todos sabemos que pasa y es bastante malo. 

El moreno suspira para levantarse al fin. Sabía perfectamente lo que le diría Tony, pero no estaba de animo para escucharle. 

-escucha, se que no quieres involucrar al resto en esto, pero aunque no quieras verlo, ella es un alfa y tiene todo para hacerte doblegar en cualquier situación- Tony toma su muñeca para que Loki le mire- no quiero verte como esa vez... 

-No pasará- susurra el peli negro y ambos dan por terminada la conversación. 

Al salir nuevamente, Loki nota que Thor ya no esta y se siente levemente mas tranquilo. 

¿Quién pensaría que aquel troglodita hombre seria tan cercano a la mujer de sus pesadillas?

De seguro si llegaba a contarle a su madre, le obligaría a regresar de inmediato, por lo mismo, había mantenido en silencio. 

-¡E-Erik!- escucha un pequeño chillido y luego algunas carcajadas, a lo que Loki no pudo resistirse ir. 

Bien, puede que aquella mujer estuviese cerca, pero tenia a sus amigos aun mas cerca y con ellos, nadie ni nada arruinaría su felicidad. 

-----------------------------------------------------------------

Espero les guste. 

Saludos!