❛ ineffable // jjk.

OO5 ͜͡🌙

Al fin era de día.

Núnca en mi vida pedí tanto porque amaneciera y fuera un día nuevo. En ésta ocasión no pude quejarme de la fastidiosa alarma ya que había despegado ojo antes de que sonara. Entré al baño, me dí una ducha rápida, me cambié a la carrera y bajé a la cocina para improvisar unos emparedados con crema de maní sin orillas.

Deseaba a gritos internos que fueran las diez, no porque quisiera ver a ese extraño, si no porque una fuerte presión en el pecho me informaba que algo andaba mal, necesitaba a todos mis secretos conmigo. Después de revisar que no tuviera algún mensaje en mi celular, subí a la habitación de Hannah para servirle de despertador. Casí eran las seis y media.

—¡despierta! ¡despierta! ¡despierta! — insistí mientras me trepaba sobre ella y la sacudía con fuerza. Parecía un saco de papas, estaba dura y rroncando pacíficamente. Seguí sacudiendo pero no se despertaba. Puse los emparedados justo frente a sus narices y tampoco desperto.

—Lo siento mucho, pequitas.— tenía que utilizar mi último recurso; 'beautiful oblivion' a todo volúmen. Si eso no la despertaba no sabía que lo haría.

• • •

—Joder Sam, hubiese sido más compasivo si solo me llamabas por mi nombre, casi me da un paro cardíaco.

Lo intenté, créeme.

—Y bueno, ¿dónde está ese tipo?

Llegamos puntual, bastante para ser verdad. Estábamos mirando fijamente la entrada, cruzadas de brazos, con nuestros cuerpos recargados en la pared. Eran las diez con cinco minutos ¿dónde estaba él y su puntualidad?

—Creo que no va a venir. Deberíamos irnos, nos estamos perdiendo de nuestro receso. — sugirió la pecosa mientras descendía al suelo, aún con la espalda recargada. Me preocupaba mucho que no llegara, pero no podía ser tan egoísta afectando a Hannah con mis secretos perdidos, ya bastante tenía con haber interrumpido sus sueños.

Sin más, me giré para quedar frente a ella y asentí. —Vamos, no vendr...— fuí interrumpida. Un olor exquisito a perfume masculino recorrió mi nariz y terminó en mis pulmones. Hann señaló con las cejas detrás mío, mientras que se ponía de píe y alguién tocaba mi hombro.

❛ Narra Jungkook ❜

Qué estoy haciéndo.

Había reunido valor de donde no tenía para pararme frente a esa desconocida y tocar su hombro. Mis manos temblaban, mi mente me pedía correr y mi corazón estaba casí escapando de mis adentros. Volteé a ver por encima de mi hombro; Mino, quién estuvo toda la mañana dándome consejos de 'lige' estaba escondido detrás de una jardinera, haciendo señas con sus manos y posicionando fijamente su mirada en mi. ¡Vámos, solo entregaría un cuaderno! Era bastante ridículo.

Disculpe haber tardado tanto, no era mi intención hacerla esperar, pero aquí ésta su cuaderno.

Extendí ambas manos, dejando a la vista y alcancé aquel objeto de su pertenencia. Permanecí con la mirada baja y no fué hasta que ella lo tomó cuando comencé a reir.

¡sano y salvo! Lo cuide con mi vida para que el gorila de mi primo que está por allá no lo dañara.

Lo señalé entre risas, risas que se fueron apagando de poco al ver sus expresiones, ella se veía confundida. Mi mente colapso al instante, no podía creer que estaba pasando de nuevo; esa mirada, la mirada que todos me dedicaban cuando intentaba hablar con ellos. Volví a mirar al suelo ahora rogando por irme ya.