Estaba en mitad de una montaña nevada. Buscaba por los lados, por arriba y me tire a la nieve buscando a esa niña tan especial para mi vida. Llorando gritaba su nombre, lo unico que habia echo fue gritar su nombre por si estaba aqui, pero ni rastro.
Me plante asumiendo esas consecuencias. La nieve se posaba en mi piel y me dolia recordar todo. Solo queria volver a casa, pero ni ganas de volver a ver a ese desgraciado. Esa persona que aunque sabia y era sensata de todo el daño que me habia provocado, en el fondo, muy muy en el fondo le extrañaba y seguia habiendo una pequeña llama ardia en mi.
Apartando la nieve con mis manos, sentia como se congelaban lentamente, pero me daba igual. Lloraba desesperadamente y a ratos hasta podia hallarme ahogandome con mis propias lagrimas.
Me derrumbaba sobre la nieve, esa nieve que incluso poniendo el blanco mas brillante que exista, esta de estacaria.
-Y-yo... si no la encuentro... p-prometo no olvidarla, no rendirme hasta encontrarla...
Lo volvia a hacer, prometer cosas que sabia que nunca las lograria cumplir. Todos hemos llegado a perder personas y olvidarlas, ya sea un amigo insignificante de la infancia o tu exnovio, y quien diga que no... que nunca ha eluido a una persona, miente.
Me levante, con la esperanza de salir de ese mugroso bucle de desesperacion y malquerencia.
-¡ODIO TODO ESTO! S-solo... dejadme salir por favor... no-no puedo mas!
Con los ojos rojos, lagrimas negras en mis mejillas iban dejando un camino de oscuridad, que posteriormente frotaba y los dejaba grisaceo sobre el parpado inferior y mejillas.
Gire la vista hacia a izquierda, me parecio oir un ruido de porcelana. Observe por todos lados, miraba y miraba, sabia que era una idiotez pero seguia con la intriga.
Volvía a gritar su nombre, esperando a que como si nada, se levantara de la nieve o apareciera de la capa borrosa de niebla. Caminaba en una extension de nieve, mis piernas y pies se congelaban mientras intentaba correr. Corría unos cuantos pasos no muy grandes y luego casi siempre me tropezaba con algunos bloques grandes y algo solidificados de nieve. Y asi hasta de la niebla invernal comencé a ver una figura en el suelo.
Corrí y corrí hasta que esa figura que parecia ser Snow, disminuia de altura, cada vez mas pequeño, mas "tierno", mas achaparrado.
Esa figura "tierna" tenia una gigantesca mueca en su rostro, unas mejillas rojizas intensas, un pelo aspero y seco y unos ojos que podias ver tu reflejo pero si te fijabas bien podias hasta ver el nivel elevado de soledad y vacio.
Tenia un lindo sombrero rojo con un gigante cascabel dorado en la punta pero en una rafaga de aire, este salio volando haciendo ruido y algunos copos de nieve colisionaban con la porcelana de la figura.
Parpadee una vez, no por mas de un segundo, jure que el muñeco no tenia esa cara. Esa gigantesca sonrisa que tenia en la cara, no estaba. Se paso de un "alegre" rostro a una faceta sin emocion y triste. Lentamente comence a caminar hacia atras. Un paso, dos pasos, tres y a cada parpadeo algo en el cambiaba.
Horrorizada comencé a correr mirando de vez en cuando atras.
-Mierda... de nuevo no...- dije maldiciendo la raza de los gnomos.
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Una pesadilla sin fin (reanudada)
HorrorEsta historia trata de un pequeño grupo de adolescentes que pocos días antes de halloween se empezaron a interesar por lo paranormal y sin pensarlo comenzaron a jugar con este tema. Pocos días después decidieron ir a un pueblo abandonado a 10Km de...