Mucho tiempo pasó entonces para darme cuenta de lo evidente.
Fue extraño hacerlo.
Fui solo el consuelo del amor que perdías.
Muy en el fondo ya lo sabía.
Y aún asi no quise aceptarlo.
Quise creer que no era verdad.
Pero como bien dice el dicho, ojos que no ven corazón que no siente.
Te diría que haría todo para no ver lo evidente.
Ella se volvío mas perra.
Se volvió mucho más superficial.
Empezó a llamar la atención de los demás.
Comenzó a vestirse como una verdadera pendeja.
Y es algo tonto.
Ella dijo que jamás sería como el resto.
Supongo que eso es lo que te gusta.
Lo facíl.
Lo que se consigue sin hacer un puto esfuerzo.
Sabes lo que hacía.
Cada vez que pasaba un chico, parecia arrastrada.
Ella se dió cuenta de que tambien le gustabas.
Pero estabas con otra.
Decidió cambiar de amigos.
Cambió toda su puta forma de pensar.
Lo mas icónico es que era amiga suya.
Sabia la gran parte de sus secretos.
Ella volvio a ser la perra de antes.
Esa que dijo que no sería más.
Nunca debiste esperar nada de ella.
Se siente malditamente bien no ser buena todo el tiempo.
Nunca creyó hacerte daño sin darse cuenta.
Empezó a destruirse a diario.
De nuevo regreso a la vida sin probar un estúpido vocado.
Quiso ser mejor te lo aseguro.
Pero no pudo.