Single Chapter

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-¡Hijo de puta... Hijo de puta... Hijo de puta! - Pensaba un pelícastaño en medio de la clase a la cual no le prestaba atención debido a su problema.

Su mirada de odio y coraje se dirigia completamente al peliazul que estaba hasta enfrente quien recibía la mirada con gusto y gracia pues tenía control completo del cuerpo del pelícastaño.

El menor llego a romper su Lápiz de tan fuerte que era su agarre y a arrugar unas cuantas hojas.

¿Cual era el problema?

Un jugete... No cualquiera, sino uno sexual... (Un dildo)

Resulta que al quedarse la noche anterior en casa de su amado peliazul este aprovecho para introducir cosas en su interior... ¿Como es que no se dio cuenta que lo llevaba? Era un idiota distraído...

Al despertar veía al peliazul soltar pequeñas risas cada que veía su trasero, pensó que era normal ya que eran pareja pero no se dio cuenta hasta llegar a la escuela del objeto en su parte trasera...

Iba a quejarse con su novio e ir al baño pero el profesor llego y no tuvo oportunidad, era muy tímido para ir al baño en media clase así que se decidio irse a su lugar que para su suerte era él último...

A mitad de la clase NamJoon se mordía la manga de su sudadera para no ser escuchado, era tan excitante pero a la vez problemática, el juguete comenzó dentro de él provocandole placer, pequeñas lágrimas de placer salían se sus ojos, mataría al peliazul al terminar el día.

-NamJoon...¿Me podrías decir la respuesta del pizarrón? - Él maestro miro al menor extrañado.

-E-eh... - "no sueltes gemidos... Resiste..." - Miro al peliazul quién le sonrió pervertidamente, eso no significa nada bueno... Y justo lo que el menor rasgara la mesa - Cu-cuatro?... Nghh - Gimió lo más bajo posible.

Las risas de los demás compañeros hicieron más incómoda la situación, no podría estar más rojo.

-Buen intento NamJoon pero estamos en lengua extranjera - Él maestro sonrió y siguió con su clase, la cual era eterna.

Su respiración se agitaba más y más, se encontraba excitado, algunas veces curvaba la espalda buscando más, él jugete no era demasiado grande para satisfacerlo como lo hace su pareja.

Oculto su cara en sus brazos para no dejar ver su rostro que estaba rojo, parecía enfermo, un hilo de saliva y respiración agitada salían de sus labios.

Mientras el peliazul sonreía satisfecho con castigar a su bebé por hablar con JiMin...

Dentro de su chaqueta blanca se encontraba el control del vibrador que tenía dentro Nam, solo verlo de reojo se sonrojaba, no podía esperar a que todos se fueran.

Al terminar las clases se encargó de que todos salieran antes, se despidió de su amigo y se dirigió al lugar de NamJoon quien seguía con su rostro oculto y solo podía escuchar su ruda respiración.

-Nam... - Puso su mano en el hombro de este.

Él menor agarró fuertemente su brazo y levanto la mirada, estába llorando, sus mejillas ardían y su saliva resbalaba por su mentón, se veía tan erotico a la vista del peliazul.

-Ha-has que pa-pare - Canturreo él menor pues las vibraciones no habían parado en toda la mañana y necesitaba algo más placentero.

-Esta bien, acuestate - Ordenó el peliazul.

El pelícastaño se levantó lentamente pues sus rodillas temblaban, se recargo en el escritorio de su lugar.

Yoon acostó al menor en su lugar, jalo a Nam para que sus miembros rozaran, el menor rodeó a YoonGi con sus piernas para tener más contacto y lo beso, empezaron con un beso apasionado, se hizo presente un juego de lenguas en el que siempre ganaba el peliazul.

Él mayor simulaba embestidas haciéndo que sus miembros se rozaran aun con la ropa encima.

-Ahh... N-no - Gemía él menor rozando sus labios con los del otro.

-¿No que? - Dijo seductoramente siguiendo con las embestidas, el menor lo volvía loco.

-A-aqui no... Por favor - Paso sus brazos por los hombros del mayor a pesar de lo que pedía estaba disfrutando de las embestidas del mayor y más con el juguete dentro.

-Nadie vendrá... - Empezo a besar al menor de nuevo pero esta vez le quitaba los pantalones y ropa interior a Nam dejándolo desnudo de la parte baja.

YoonGi levanto las piernas de NamJoon y las puso sobre sus hombros, en una posición más comoda, bajo sus pantalones y ropa interior dejando ver una gran ereccion.

El peliazul saco él jugete del interior del menor quien soltó gémidos, estaba desesperado.

YoonGi empezó a rozar su miembro contra la entrada del menor quien tomo la mano de su pareja desesperado.

-Po-por favor... - La mirada del menor era tan erotica, daban ganas de follarlo hasta destrozarlo.

Tomo al menor de las caderas y lo embistió de una sola estocada provocando gémidos del menor y que curvara la espalda varias veces, por suerte el pelícastaño ya estaba preparado.

Las embestidas y gémidos aumentaban, la presión en el aire disminuyó, solo sus respiraciones eran agitadas.

Él mayor sintió un cosquilleo problema su estómago, eso indicaba que estaba a punto de terminar, NamJoon se corrió repentinamente en los estómagos de ambos, la entrada del menor se contrajo haciendo que YoonGi se corriera dentro del pelicastaño.

Al sacar su miembro NamJoon soltó un quejido, YoonGi plantó un pequeño beso en los labios de su pareja, después de esto el pelícastaño no hablo mas con JiMin.

𝗝𝘂𝗴𝘂𝗲𝘁𝗲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora